Alberto Fernández busca el apoyo de la Unión Europea ante el FMI
El presidente de Argentina inicia una gira por España, Vaticano, Italia, Alemania y Francia en el inicio de las negociaciones por la deuda externa
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner volverá hoy a quedar a cargo del Poder Ejecutivo de forma interina hasta el jueves 6 de febrero, día en que Alberto Fernández regresará de la gira por Europa
El Político
Será la segunda vez que Cristina quede a cargo de la Presidencia, luego de haberlo hecho la semana pasada entre el 21 y el 25 de enero, cuando Alberto Fernández viajó a Israel para participar del Foro del Holocausto.
Alberto Fernández necesita el apoyo de la Unión Europea. Desde este viernes, intentará sumar voluntades detrás de su plan de negociación de la deuda externa que Argentina ha iniciado con el Fondo Monetario Internacional y sus acreedores privados.
El líder peronista reconoce que no puede asumir los compromisos asumidos con los acreedores por Mauricio Macri, su predecesor en el cargo, y buscará la mano extendida de España, Italia, Francia y Alemania
Fernández aprovechará su escala vaticana para visitar al primer ministro de Italia, Giuseppe Conte; el domingo viajará a Berlín, donde lo espera la canciller Ángela Merkel; y luego a Madrid, donde repetirá, esta vez como jefe de Estado, el encuentro que mantuvo en septiembre pasado con el jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez. El argentino cerrará su gira el 5 de febrero en París, con un almuerzo con el presidente Emmanuel Macron.
A todos los líderes europeos les pedirá su apoyo ante el Fondo Monetario Internacional, el principal acreedor de Argentina, y el resto de los bonistas privados. “Son votos y acompañamientos que necesitamos”, dijo Fernández la semana pasada en Israel.
Solo la deuda de Argentina con el FMI asciende a 44.000 millones de dólares, la cantidad que el organismo había desembolsado en Buenos Aires de los 57.000 millones acordados con Macri en 2018.
En agosto pasado, cuando el cuadro macroeconómico argentino se descompuso, se cortaron los pagos. Fernández rechazó cualquier nuevo desembolso con el argumento de que solo serviría para aumentar aún más una deuda ya impagable. El trabajo que el nuevo Gobierno peronista tiene por delante es lograr una agenda de pagos acorde con la crisis que ha vaciado de dólares a la economía argentina, derrumbado los indicadores de crecimiento y disparado la inflación y el desempleo.
En la víspera del inicio de la gira de Fernández, el Gobierno publicó un cronograma de negociaciones más laxo del que se esperaba, con fecha de cierre en el límite de la suspensión de pagos.
Durante febrero, Argentina discutirá con los bonistas posibles escenarios de quita de capital y prórrogas de intereses, mientras espera para el día 12 de febrero una misión del FMI. La oferta definitiva estará durante la segunda semana de marzo. Luego se verá el nivel de adhesión y se avanzará en el papeleo para el inicio de los pagos reprogramados. El éxito de semejante estrategia necesita del apoyo internacional, y en eso está ocupado Fernández.
Los países que visitará el argentino suman entre todos el 14,29% de los votos del FMI, y pueden ser claves para que el directorio apoye una propuesta argentina.
Al otro lado del Atlántico, Estados Unidos, con el 16,52% de los votos del Fondo, ha mantenido un silencio prudente, más cercano a un apoyo que a un rechazo. El viernes pasado, Washington excluyó a Argentina de los aranceles al aluminio y al acero aplicados en el marco de la guerra comercial con China, un gesto que supuso un apoyo a la gestión de Fernández.
Estados Unidos fue la llave del crédito que el FMI otorgó a Macri, el más grande de su historia por el volumen. El presidente Donald Trump tiene una larga historia de amistad con el argentino y medió ante la secretaria ejecutiva del Fondo, Christine Lagarde. La sucesora de Lagarde, Kristalina Georgieva, debe ahora administrar esa pesada herencia.
La semana que viene se cruzará en Roma con el ministro de Economía argentino, Martín Guzmán, aprovechando un seminario sobre economía solidaria organizado en el Vaticano por la Pontificia Academia de Ciencias Sociales. Guzmán es un experto en planes de reestructuración de deuda que Fernández repatrió desde la universidad de Columbia, donde trabajaba bajo el paraguas académico del Nobel de Economía Joseph Stiglitz.
Guzmán ha mantenido en secreto los detalles de la oferta que hará al FMI y a los bonistas privados que esperan recuperar el dinero que prestaron a Argentina. Pero Fernández no llegó a Europa con las manos totalmente vacías. El miércoles, el Congreso dio, con el voto opositor, media sanción al proyecto de ley que autoriza al Ejecutivo a renegociar la deuda externa. Con ese mandato, que pasará sin problemas por el Senado durante la semana próxima, el ministerio de Economía difundió el cronograma de las negociaciones.
Argentina negocia con el Fondo Monetario Internacional
El ministro de Hacienda, Martín Guzmán, se reunió este martes en Nueva York con funcionarios de la institución. Luis Cubeddu, jefe de la misión del FMI en Argentina, dijo que, "dentro de todo", el encuentro fue "bastante productivo" y empezaron a establecerse "los pasos a seguir".
Aunque el Gobierno de Buenos Aires fijó la fecha del 31 de mayo como límite para alcanzar un acuerdo con los acreedores públicos y privados, la renegociación de la deuda se encuentra aún en una fase muy preliminar. De hecho, aún no se ha decidido qué hacer con el préstamo de 57.000 millones concedido por el Fondo al Gobierno de Macri en septiembre de 2018.
Guzmán se reunió en el Consulado argentino de Nueva York con Cubeddu y con Julie Cozack, directora adjunta del Departamento para el Hemisferio Occidental. Luego se entrevistó con funcionarios del Tesoro estadounidense
Vaca Muerta, la esperanza petrolera
El yacimiento de Vaca Muerta, en el sur de Argentina, es un polo potencial de recuperación económica para el país, altamente endeudado. Pero la producción requiere de inversiones que el ‘riesgo país’ pone en peligro.
En opinión de Spotorno, la idea de Guillermo Nielsen de "encapsular” Vaca Muerta del riesgo de impago del país creando una especie de fideicomiso en el que parte de las exportaciones garanticen el pago de la deuda, sería una buena alternativa.
Se necesitan tarifas de gas competitivas para que Vaca Muerta sea explotable, y Argentina tiene que resolver el tema riesgo país, o aislar a Vaca Muerta de la crisis económica.
Se espera que el gobierno defina un mecanismo claro acerca del ajuste de tarifas y de los planes de cara a las inversiones en el yacimiento. "Alberto Fernández entiende que hay que subir las tarifas, si no, no va a haber inversiones en el sector y nos va a volver a pasar lo que pasó durante el gobierno de Cristina Kirchner, cuando que el gobierno rogaba que alguien pusiera un dólar en inversiones, y, al mismo tiempo, subsidiaba las tarifas a mansalva.
Buenos Aires quebrado
El problema de la deuda de la Provincia de Buenos Aires es un incómodo apéndice de la deuda total. El gobernador provincial, Axel Kicillof, pide que el pago de los bonos que vencieron el pasado domingo por importe de 250 millones de dólares se aplace hasta el 1 de mayo, pero los acreedores se resisten.
Para lograr el aplazamiento sería necesario que el 75% de ellos se mostraran de acuerdo. Hasta ahora, solo el 24% acepta. El límite se ha fijado para el 5 de febrero. El riesgo de un default provincial sigue ahí.
El peronismo ya no mete miedo
Cuando la amplísima victoria de Alberto Fernández en las primarias de agosto demostró que iba a alcanzar la presidencia, los inversores entraron en pánico: la Bolsa cayó un 38% y el peso se devaluó un 25% en una sola jornada. Pero tras el acceso de Fernández a la Casa Rosada, el 10 de diciembre, las cosas cambiaron de forma radical. La Bolsa de Buenos Aires ha subido un 20%, el peso permanece estable y, lo más revelador, el bono Bonar 2020 permanece estable.
Tal vez el Papa y una taza de buen mate logren el milagro.
El País, BBC, Friends