Al parecer el gobierno Estados Unidos estima realizar nuevas restricciones relacionadas con los permisos de trabajo a los solicitantes de asilo.
El Político
La nueva resolución de la administración de Donald Trump indicaría que quienes hayan solicitado asilo solo podrán aplicar para la autorización de trabajar después de haber permanecido al menos un año en Estados Unidos, informaron diferentes medios de comunicación locales.
Un agente del Departamento de Seguridad Nacional declaró a la cadena NBC, que esta nueva decisión tiene por objetivo que quienes busquen el asilo puedan trabajar después de estar un año en Estados Unidos y se mantengan con el dinero que traen, se desconoce si serían sancionado los migrantes que laboren mientras esperan el resultado de su solicitud, reseñó diariolibre.com.
Según el funcionario, la finalidad de esta decisión es detener las solicitudes presentadas por ciudadanos mexicanos, ya que este año se ha incrementado el número de peticiones de migrantes aztecas, mientras ha bajado las demandas de los residentes de las naciones centroamericanas.
Hasta ahora quienes esperan por un asilo en Estados Unidos pueden solicitar un permiso de trabajo 150 días después de haber presentado su solicitud.
Los permisos de trabajo se otorgan mientras un juez de inmigración se pronuncia sobre la petición.
Algunos datos han revelado que a causa del trabajo atrasado en las cortes de inmigración, el aspirante a un asilo puede esperar cerca de dos años para que sea otorgado.
El primer mandatario de los Estados Unidos le exigió a su administración que revisen todos los vacíos legales que existen en la solicitud de asilos, su requerimiento lo ha hecho especialmente a los congresistas para que realicen ‘cambios simples’ y eviten supuestos fraudes en el proceso.
Una de las medidas que tomó Trump para disminuir el flujo de migrantes por la frontera con México, es exigirle que realicen su solicitud en un tercer país antes de llegar a Estados Unidos, por ende las personas tienen que realizar su petición y esperar en una nación diferente mientras esperan la respuestas por parte de los funcionarios estadounidenses.
Para lograr que otros países reciban a los migrantes que desean establecerse en EEUU, Trump realizó una serie de acuerdos con El Salvador, Guatemala y Honduras para que las personas se queden en esas naciones mientras esperan por los trámites, su objetivo es evitar que lleguen a Norteamérica.
También Washington negoció con México el llamado Protocolos de Protección de Migrantes (PPM), para que las personas que deseen asilo en Estados Unidos se queden en el país azteca mientras esperan la respuesta de su solicitud.