La crisis política de Brasil volvió a intensificarse. Ahora, el presidente, Michel Temer, es acusado de tráfico de influencias y existen grabaciones que lo delatan. Su ex ministro de Cultura, que renunció la semana pasada, Marcelo Calero, lo denunció ante la Policía Federal por presionarlo para que se habilite la construcción de un edificio, propiedad de otro miembro del gabinete, Geddel Vieira Lima.
Se trata de un torre de 30 pisos, llamada “La Vue”, que Geddel pretende construir en Salvador (la capital de Bahía), en un lugar no permitido por tratarse de patrimonio histórico nacional y patrimonio de la humanidad.
Calero tenía bajo su cartera el Instituto de Patrimonio Histórico Artístico Nacional (IPHAN), que decide sobre la posibilidad o no de localizar un predio en una zona histórica. Y la institución no permitió erigir un edificio tan elevado.
De ahí vino también presión de Temer a Calero, a quien le dijo que debía “resolver ese problema” y que la manera de hacerlo era dejarlo en manos de la ministra de la Abogacía General de la Unión, Grace Mendonca. Lo cierto es que todas estas “conversaciones” con Temer y otros funcionarios fueron grabadas por Calero, que ayer le entregó las cintas a la policía.
La oposición anticipó, a través del senador Lindbergh Farias, del Partido de los Trabajadores, que pedirá la apertura de un "impeachment" contra Temer. "El presidente usó su cargo para defender intereses privados, eso es un delito de responsabilidad de Estado, la declaración de Calero ante la policía es un escándalo, espero que el Congreso juzgue a Temer", dijo Farias en el Senado.
Esta mañana la Procuración General requirió la apertura de una investigación contra Temer por delito de responsabilidad contra el presidente, Vieira Lima y otro de sus ministros del núcleo duro del gobierno Eliseu Padilha. Afirma que el caso está tipificado en el artículo 321 del Código Penal, donde se juzga como delito grave “patrocinar directa o indirectamente el interés privado ante la administración pública, valiéndose de la calidad de funcionario”.
Con información de El Clarín