El Tribunal Supremo absolvió a un hombre que fue condenado en segunda instancia a cuatro años de prisión por abusar sexualmente de su hija y determina que no puede entenderse como única prueba de cargo la declaración de la menor, de 11 años en el momento de los hechos, porque "no resulta creíble".
Los hechos tuvieron lugar en 2012 cuando la niña se encontraba de vacaciones en la casa que su padre tiene en Colombres (Asturias) y, en un momento dado se metió en la cama del hombre el cual, siempre según la menor, le produjo tocamientos; una situación que se repitió un fin de semana de febrero de 2013. Según la resolución de la Audiencia Provincial de Oviedo de 2016 la menor no le dijo nada a su madre —divorciada del padre desde 2005— hasta un mes después, lo que conllevó a la interposición de una denuncia por indicación del psicólogo del centro de salud mental donde fue atendida.
Con información de 20minutos