Las aguas del Asia Pacífico tendrán otra nación con submarinos con tecnología nuclear. EEUU. invitó a unirse al selecto grupo a Australia; y, al parecer, provocó la ira de China. Por eso muchos se preguntan: ¿Al gigante asiático le preocupa la alianza entre EEUU, Australia y el Reino Unido en el Pacífico?
El Político
Antes de esta histórica unión entre EEUU, Australia y el Reino Unido en el océano Pacífico; ,Joe Biden llamó Xi Jinping para hablar de las relaciones bilaterales y evitar un conflicto entre ambas naciones.
Sin embargo, este nuevo acuerdo tiene un fin común: "Incrementar el poder de disuasión de sus integrantes”; por esta razón no hizo falta nombrar a China,
Relación entre EEUU, Reino Unido y Australia: Nació AUKUS
No obstante, el acuerdo -más reciente- liderizado por Washington en la región fue firmado el pasado miércoles y se llama AUKUS: acrónimo de Estados Unidos, Reino Unido y Australia.
¿La finalidad? Contrarrestar la amenaza china y reforzar la cooperación trilateral en tecnologías avanzadas de defensa.
Existen diferentes temas de importancia para EEUU, Reino Unido y Australia en el acuerdo AUKUS.
Estados Unidos discute la primacía global con China; por su parte Reino Unido desea nuevas zonas de influencia luego de irse de la Unión Europea; finalmente, Australia ha tenido algunos roces Con China en este 2021, reportó El Periódico.
¿EEUU ahonda el cambio hacia Asia que comenzó Obama?
El AUKUS aparece a las pocas semanas de la "apresurada huida de las tropas estadounidense de Afganistán y profundiza el viraje hacia Asia que ya emprendiera Obama tras las calamitosas aventuras en Oriente Medio", explicó El Periódico.
Sobre las áreas de colaboración que tendrán EEUU, Reino Unido y Australia son muy dispares: información, inteligencia artificial, tecnología cuántica y la militar.
En esta última área hay mucha expectativa, ¿El motivo? Australia fabrica ocho submarinos propulsados con reactores nucleares con la asesoría estadounidense y británica.
Estos submarinos son más rápidos, más difícil de detectar y tienen mayor autonomía.
Al observar esta nueva flota, se puede concluir que la hegemonía occidental está el patio trasero chino. No portarán armas nucleares, prometió Australia, no obstante, la aclaración no tranquilizara a Pekín. Ni a Francia, quien decidió este sábado retirar a su embajador de Camberra.
China protestó por esta alianza, pero no fue el único paíslll
La embajada china en Washington, la prensa oficial, el Ministerio de Exteriores; en fin, todos los organismos que están bajo el poder del partido comunista de China, critican -decididamente- a los firmantes.
"El acuerdo estimulará la carrera armamentística en la zona y perjudicará la paz y estabilidad en la zona", pronosticó Zhao Lijian, portavoz ministerial.
El polémico editorial del ‘Global Times’
Esta semana, un editorial del Global Times‘, lamentó:
“Histérica política de alianzas estadounidense”; además, veía en el acuerdo una “legalización de la exportación de tecnología nuclear” con consecuencias funestas a escala global.
“La posesión de submarinos con tecnología nuclear será una tentación generalizada. El mundo necesita prepararse para la fiebre por esos submarinos”, pronosticaba.
¿EEUU y sus aliados lleva al mundo hacia el caos o se defienden?
“Estados Unidos y sus aliados están llevando el mundo al caos. Incluso han vulnerado los acuerdos de no proliferación de armas nucleares, aseveró El Periódico..
La siguiente pregunta es: ¿Quién está más preparado para resistir en el caos global? ¿China o ellos?”.
Expertos internacionales también anticipan que por la nueva “vía australiana” transitarán otros gobiernos para vulnerar los tratados de no proliferación nuclear.
Adicionalmente, naciones de la zona mucho más amenazados que la lejana Australia como Corea del Sur también podrían replantearse su fidelidad a los compromisos si les embarga una insuperable sensación de ingenuos.
China no está sola…
China no está sola en la condena. Francia, también protestó, más inquieta por el bolsillo que por las turbulencias en la otra punta del globo. El AUKUS deja en papel mojado el acuerdo para construirle a Canberra una docena de submarinos a cambio de más de 30 mil millones de euros.
Otro aspecto claves es la notoria la ausencia en el acuerdo de Nueva Zelanda, que impedirá la entrada de los submarinos nucleares en sus aguas.
Sin embargo, muchos no ven Australia le ven la lógica al terco vínculo con Estados Unidos en su cruzada contra China. Para el exprimer ministro, Paul Keating, el acuerdo supone una “dramática pérdida de soberanía y una dependencia de Estados Unidos que privará a Australia de su libertad a elegir en cualquier combate”.
No obstante, seguimos observando los acontecimientos para conocer su desenlace.