Bolivia prevé un crecimiento económico para 2017 de 4,7 % de su Producto Interno Bruto y una inflación menor a cinco en el Programa Fiscal Financiero, vaticinó este miércoles el ministro de Economía, Luis Arce.
Dicho plan se firma desde 2006 con el Banco Central de Bolivia (BCB), como parte del libre ejercicio de la soberanía estatal y en reemplazo de los memorándums de entendimiento que anteriores administraciones gubernamentales suscribían con el Fondo Monetario Internacional (FMI), explicó.
Según Arce, el incremento para este año tiene sus principales motores en la expansión de sectores como la construcción de obras sociales, electricidad y agua. Así como la administración pública; establecimientos financieros, inmuebles y servicios a empresas.
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A ello se suma minería, manufactura, transporte, almacenamiento, comunicaciones, hoteles y restaurantes. Además del comercio y la agricultura.
El ministro remarcó que la estabilidad económica del país está garantizada y liderará este año, una vez más, el crecimiento en la región. Contrario a las proyecciones pesimistas de organismos internacionales, como el Banco Mundial, el FMI y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
Por su parte, el presidente del BCB, Pablo Ramos, ratificó su compromiso de trabajar este año para mantener la redistribución de los ingresos entre la población.
Con información de Prensa Latina