El Ministerio de Planificación, con Julio De Vido a la cabeza, pagó la construcción de obras en el monasterio donde el ex secretario de Obras Públicas José López intentó esconder casi U$S 9 millones, y en cuyo subsuelo se hallaron bóvedas que podrían ser utilizadas para esconder dinero.
Con fecha del 9 marzo de 2007, el gobierno kirchnerista gestionó 510.559,31 pesos para financiar la vivienda en la que monseñor Rubén Di Monte, obispo emérito de Luján y consejero espiritual del ex titular de Planificación, Julio De Vido, pasó el tiempo que medió entre su retiro y su muerte, en abril pasado. Se trata del expediente 0345172/2006, según surge de la documentación a la que accedió LA NACION.
En la nota, que lleva el sello del Ministerio de Planificación, se indica que el "señor Arzobispo de Mercedes – Luján" solicitó esa suma de dinero para "afrontar la construcción de la casa del Capellán y de otros arreglos necesarios en el Monasterio".
A tal fin, se celebró "un convenio de colaboración y transferencia de fondos entre la Secretaría de Obras Públicas [en ese entonces a cargo de López] y el Arzobispado". La gestión quedó a cargo de la Subsecretaría de Obras Públicas, que en ese momento encabezaba Hugo Rodríguez, antecesor de Abel Fatala.
El certificado al que hace mención la nota fue presentado por el Arzobispado de Mercedes-Luján y supervisado por los arquitectos Anahí Zapata y Víctor Yajima, de la Dirección Nacional de Arquitectura.
Como publicó LA NACION esta semana, medido en dólares según la cotización del 8 de octubre de 2007, cuando está fechado el documento, el presupuesto del proyecto era de US$ 160.553.
Con Información de: La Nacion