La Justicia de Uruguay alcanzó un "récord en cantidad de procesados en un solo procedimiento", tras acabar con una organización delictiva que reclutaba personas de bajos recursos para realizar estafas a agencias crediticias e instituciones financieras, según informaron hoy fuentes oficiales.
El ministerio del Interior anunció la desarticulación de esta organización que, según estimó la cartera, ocasionó pérdidas de "entre ocho y diez millones de pesos" (unos 400.000 dólares) en total para las instituciones afectadas.
Según explica el escrito, "la modalidad consistía en reclutar personas de bajos recursos o en situación de calle, brindarles documentación falsa y hacerles solicitar préstamos de dinero" en diferentes bancos y casas de crédito.
Sin embargo, la maniobra quedó en evidencia cuando las personas no concurrían a pagar la cuota y no podían ser ubicadas por las instituciones financieras.
El grupo era liderado por una familia, que consistía en una mujer que trabajaba como tarotista, su esposo y su hijo.
A su vez, contaban con "reclutadores" que cobraban un sueldo por reclutado de 3.000 pesos uruguayos (unos 100 dólares) y que recorrían la ciudad en busca de personas que pudieran servir para las estafas.
La Policía uruguaya constató que la mayoría de los individuos involucrados declaraba ante las instituciones direcciones que correspondían con terrenos baldíos, casas precarias en zonas marginales e incluso lugares sin construcción de la capital uruguaya.
En tanto, los agentes policiales incautaron armas de juguete, vehículos, documentación falsa y otros elementos que utilizaban los miembros de la organización para llevar a cabo las estafas.
Dentro de los 64 procesados, 45 fueron con prisión y 19 sin prisión, según informó el ministerio del Interior.
Por otra parte, otras 41 personas siguen siendo buscadas por las autoridades uruguayas por esta operación, que se denominó "Esfiur" y que comenzó a investigarse en 2015.
Con información de EFE