El decreto de Mauricio Macri que autoriza el ingreso de familiares de funcionarios al blanqueo de capitales provocó ayer una nueva crisis en el oficialismo parlamentario. El jefe del interbloque de Cambiemos, el radical Mario Negri, criticó la decisión del Presidente, en línea con los cuestionamientos de la oposición.
"Creo inconveniente cualquier forma de incluir a las personas que están exceptuadas en la ley de blanqueo de capitales", dijo en Twitter, en consonancia con el malestar que iba creciendo en el interior del bloque de la UCR. Las palabras de Negri sobresalen también ante el silencio de Elisa Carrió, promotora del artículo de la ley que excluyó a los familiares de los funcionarios.
La decisión de Macri quedó plasmada en el decreto reglamentario 1206/16. Como ni siquiera es un decreto de necesidad y urgencia (DNU), no está sometido a la revisión del Congreso. El texto indica que quedan habilitados para ingresar en el blanqueo padres, hijos y cónyuges de funcionarios, siempre que los bienes a exteriorizar hayan sido adquiridos antes de que los funcionarios hubieran asumido en sus cargos.
Anteayer hubo una fuerte reacción de la oposición. El kirchnerismo denunció que era un decreto hecho a la medida de Franco Macri, el padre del Presidente. La diputada María Emilia Soria presentó una denuncia penal contra Mauricio Macri, Marcos Peña y Alfonso Prat-Gay, los firmantes del decreto, por "abuso de autoridad". En el massismo el más duro fue Felipe Solá: "Macri firmó el decreto para que su padre pueda blanquear plata", dijo, y lanzó una chicana contra la jefa de la Coalición Cívica: "Se espera opinión de Carrió con gran expectativa". El Bloque Justicialista también cuestionó la medida.
Negri hizo pública su opinión después de una reunión de la mesa del interbloque de Cambiemos, que también integran Emilio Monzó, Nicolás Massot, Silvia Lospennato, Miguel Bazze, Jorge D’Agostino y Fernando Sánchez. Ese cuerpo pidió al Poder Ejecutivo los antecedentes jurídicos del decreto, pero la respuesta no resultó satisfactoria. A la mañana, el diputado macrista Luciano Laspina había ensayado una explicación: "El decreto del Presidente tiene la filosofía de aclarar el caso de funcionarios recién asumidos".
El jefe de los diputados radicales agregó argumentos: "Las características del decreto resultan incompatibles con una interpretación expansiva del universo de beneficiarios", dijo.
Con información de La Nación de Argentina