A Estados Unidos le preocupa la falta de información sobre uno de los seis ex prisioneros de Guantánamo que llegaron en el 2014 a Uruguay y que se presume abandonó el país a través de la frontera con Brasil, dijo el lunes la embajadora de ese país.
“Nos preocupa cualquier señor como el señor Dhiab (Abu Wa’el Dhiab), que una vez estuvo en Guantánamo y que puede ser…”, dijo la embajadora Kelly Keiderling en una rueda de prensa y no terminó la frase. Agregó que “no controlamos a los seres humanos, o sea que quién sabe qué está en su cabeza. Saber si es o no un riesgo, entender en qué está, dónde está, qué planea; en el mundo de la seguridad se hace todo lo posible para entender cuáles podrían ser las amenazas y ver si hay maneras de mitigar esas amenazas”.
El gobierno de Estados Unidos está en comunicación con sus pares de Uruguay y Brasil para saber qué es de la vida de Dhiab, dijo. “Estamos en comunicación con ambos países para saber de él. Si él hizo algo, o nosotros hemos oído algo, compartir esa información”.
Keiderling se negó a dar detalles sobre el acuerdo entre los gobiernos de su país y de Uruguay para posibilitar la llegada de los ex prisioneros a Montevideo y tampoco quiso responder si los ex detenidos habían firmado algún tipo de acuerdo con Estados Unidos antes de ser liberados que los comprometiera a permanecer cierto período de tiempo en Uruguay.
Sin embargo, dijo que preferiría que Dhiab se encontrara en Uruguay buscando integrarse a la sociedad local.
La embajadora agradeció al gobierno y al pueblo uruguayo por haber recibido a los ex prisioneros.
Las autoridades uruguayas han insistido durante semanas en que el sirio Dhiab cruzó la frontera hacia Brasil sin violar la ley ya que, como refugiado, tiene derecho a salir de Uruguay. Pero el gobierno brasileño ha dicho que no existe registro de que Dhiab haya ingresado al país.
Danilo Alves, vocero de la aerolínea colombiana Avianca en Sao Paulo, dijo The Associated Press que su compañía emitió una alerta interna para ubicar a Dhiab en base a información de la policía federal brasileña, que incluye a una unidad antiterrorista.
Dhiab es uno de seis ex presidiarios de la base estadounidense en Cuba que fueron reubicados en Uruguay a fines del 2014.
El entonces presidente José Mujica los invitó al país sudamericano como un gesto humanitario, pero varios han tenido problemas. En un principio se quejaron de que el gobierno no los estaba ayudando lo suficiente y también se negaron a buscar empleo, lo que generó críticas de los uruguayos.
Dhiab, que sufre varios problemas de salud relacionados con huelgas de hambre que emprendió mientras estaba detenido en Guantánamo, ha sido especialmente expresivo sobre su infelicidad en Uruguay. En una entrevista dijo tener simpatías con la red terrorista Al Qaeda.