El ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Gustavo Mata, solicitó a Estados Unidos su colaboración para construir puentes en territorio indígena, según informó oficialmente el Ministerio de Seguridad Pública.
La petición se realizó hoy al embajador de EEUU en el país, Fitzgerald Haney, durante una visita que ambos realizan a la zona indígena de Piedra Mesa, Talamanca (Limón, Caribe del país) para reafirmar el compromiso de ayuda efectuada con la misión humanitaria denominada "Pura Vida" que lleva ayuda sanitaria a los aborígenes.
El ministro solicitó al embajador "una segunda incursión humanitaria en la zona indígena con la intención de construir puentes que faciliten el cruce de ríos y quebradas por parte de estos pobladores", según la fuente oficial.
La idea del ministro de Seguridad Pública es que se faciliten las vías de acceso y de paso de los indígenas y así "puedan movilizarse con mayor prontitud por tierra en caso de alguna emergencia para evitar que mueran ahogados o que tarden días en llegar a un Centro Médico para recibir atención".
"El Servicio de Vigilancia Aérea (SVA) del Ministerio de Seguridad Pública constantemente efectúa vuelos ambulancia, pero no siempre las condiciones del clima o el acceso en montaña permite aterrizar, de ahí que es necesario contar con facilidades de paso por tierra para garantizar mejor calidad de vida a los indígenas del país", dijo el ministro.
La operación de montaña "Pura Vida" cuenta con 46 especialistas donde hay médicos generales, odontólogos, farmacéuticos, entre otros nacionales y extranjeros y que, a la fecha, han atendido a 700 indígenas cabécares de la Alta Talamanca.
Estos especialistas, además del material, han sido trasladados por cinco helicópteros del Comando Sur de Estados Unidos.
Es la quinta vez que Costa Rica recibe este tipo de ayuda, proveniente de la Embajada de los Estados Unidos, y en esta ocasión la misión humanitaria fue denominada "Operación Pura Vida", en respuesta a una solicitud del Gobierno costarricense.
La operación responde a un problema de accesibilidad, ya que estos indígenas pueblan uno de los territorios más aislados de Costa Rica, al que se accede a pie, marchando durante días, o en helicóptero.
Según datos oficiales, en Costa Rica, un país de 4,7 millones de habitantes, hay cerca de 104.000 indígenas, distribuidos en ocho grandes pueblos: Bribís, Cabécares, Malekus, Chorotegas, Huetares, Teribes, Bruncas y Ngäbes, en los cuales se registran altos niveles de pobreza y falta de acceso a servicios básicos.
Con información de EFE