La flamante fiscal general Pam Bondi anunció este miércoles en una potente conferencia de prensa nuevas medidas legales contra el Nueva York, sus altos funcionarios y el jefe del Departamento de Vehículos Motorizados del estado por ir contra el Departamento de Justicia y no hacer valer las leyes migratorias.
Según Bondi, la Administración Trump tomó acciones contra la gobernadora Kathy Hochul y la fiscal general estatal Letitia James, alegando que están protegiendo a los inmigrantes ilegales poniéndolos por encima de la ley federal.
"Este es un nuevo Departamento de Justicia", dijo Bondi. “Nueva York ha decidido priorizar a los inmigrantes ilegales sobre los ciudadanos estadounidenses. Esto se acaba. Se acaba hoy”.
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La fiscal general, recientemente juramentada, también anunció que Mark Schroeder, comisionado del Departamento de Vehículos Motorizados de Nueva York, fue acusado de no hacer cumplir la ley migratoria.
Particularmente, Bondi citó las leyes Green Light, más conocida como la ‘Ley de Licencias de Conducir’, que facilita a los inmigrantes ilegales obtener una licencia de conducir e imposibilita que algunas agencias federales tengan acceso a la información de las licencias de conducir del estado de Nueva York.
"Tienen leyes de luz verde, lo que significa que están dando luz verde a cualquier inmigrante ilegal en Nueva York, donde los agentes de la ley no pueden verificar su identidad si los detienen (…) Y los agentes de la ley no tienen acceso a sus antecedentes. Y si estos valientes hombres y mujeres detienen a alguien y no pueden verificar sus antecedentes, no tienen idea de con quién están tratando, lo que pone sus vidas en riesgo todos los días”, afirmó Bondi.
El anuncio contra Nueva York no es la primera medida que toma la Administración Trump en materia migratoria contra un “estado santuario”.