Jesús Rafael Álvarez, preso político de 44 años, falleció el 12 de diciembre en el Internado Judicial de Tocuyito, Carabobo.
Su muerte, confirmada por el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), ocurrió en circunstancias aún desconocidas y ha generado preocupación y demandas de justicia.
Álvarez fue arrestado el 2 de agosto en El Callao y desde entonces se encontraba recluido en condiciones que han sido objeto de críticas por parte de defensores de derechos humanos. Su familia fue informada del fallecimiento a través de redes sociales, lo que generó un profundo dolor y confusión. El hijo de Álvarez se dirigió a la morgue para identificar el cuerpo, tras recibir la noticia, y se encontró con la negativa del personal del penal sobre la muerte de su padre.
La Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) ha exigido una investigación exhaustiva e imparcial sobre las circunstancias que rodearon la muerte de Jesús Rafael Álvarez. Asimismo, han demandado la entrega inmediata del cuerpo a su familia y han solicitado la liberación de su madre, quien también se encuentra detenida.
Este trágico acontecimiento resalta la situación crítica que enfrentan los presos políticos en Venezuela.
Actualmente, se estima que hay más de 1,900 personas detenidas por motivos políticos en el país, lo que plantea serias preocupaciones sobre el respeto a los derechos humanos y las condiciones carcelarias.