La Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala (Odhag) aseguró que el Estado es "cómplice" de las muertes infantiles en el país al propiciar un modelo económico que ocasiona, "por acción u omisión", la enfermedad y muerte biológica de su población infantil y adolescente.
Los términos bajo los que actúa esa política, que representa "enfermedad, desnutrición crónica y aguda" o redes de microexplotación o muerte, se hacen notables, por ejemplo, en el ascenso de la mortalidad infantil en menores de 5 años, que pasó de 14,7 en 2014 a 15,3 en 2015.
"Aparentemente no es considerable, pero en el análisis regional continental significa que se mantiene una tendencia en el país de conservar la tasa más alta de la región. Esta sociedad está, en todo caso, ante una lógica biopolítica de control", aseguró la entidad pastoral en un informe sobre la situación de la niñez.
Otro de los aspectos que analiza el documento, hecho público este martes bajo el título "La desprotección en la desigualdad", señala que la tasa de la desnutrición crónica continúa en ascenso, pues pasó de 0,1 por cada 1.000 en 2009 a 26,1 por cada 1.000 en 2015.
La mayoría de estos casos están concentrados en los departamentos de población indígena, como el caso de Alta Verapaz, en donde se registraron más de 31.000 casos en 2015, o en el municipio de San Mateo Ixtatán (Huehuetenango), donde 8 de cada 10 niños menores de 5 años padecen desnutrición crónica.
"Es indignante que en el 2015, cada 24 horas el Ministerio Público (MP-Fiscalía) haya registrado un promedio de 32 niños o adolescentes víctimas de maltrato y, peor aún, que cada día se haya producido un homicidio", enfatizó la entidad, quien además dijo que en los últimos tres años se registró un suicidio cada cinco días en adolescentes de entre 12 y 17 años.
Según datos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), hay un promedio de 24 agresiones sexuales diarias en adolescentes y de estas 9 corresponden a mujeres entre 13 y 17 años.
Por su parte, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social registró en promedio 5 embarazos de menores de 14 años cada 24 horas y 212 en adolescentes entre 15 y 19 años.
La Odhag calcula además que unos 3,5 millones de guatemaltecos no tienen acceso a la educación y, ante todas estas cifras, asegura, es necesario incrementar la inversión pública y crear propuestas para este colectivo, para que se generen "condiciones óptimas para una vida digna".
"Nos ofende cómo a través de diferentes ejercicios de violencia, que van desde la más directa hasta la más difusa, de la violencia física a la estructural, se ha colocado a la niñez en el último cajón de los excluidos, que ya no son solamente explotados y desprotegidos, sino también sobrantes y desechables", advierte.
La entidad pastoral especializada en derechos humanos de la Arquidiócesis de Guatemala lamentó además que 25 años después de la ratificación de la Convención de los Derechos del Niño, el Estado no ha sido capaz de llegar a la realidad cotidiana de los pequeños, por lo que la institución expresó su "suma preocupación" por el deterioro paulatino pero "abrupto" de este colectivo.
Con información de EFE