Choque entre la administración Biden y la Universidad de Phoenix. Luego de una investigación que se extendió por años, la Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés) y el Departamento de Educación (DOE, por sus siglas en inglés) determinaron que la casa de estudios superiores engaño a sus estudiantes.
El Político
De acuerdo con las conclusiones de la FTC y el DOE, la academia con sede Arizona, al sur de Estados Unidos, atrajo alumnos mediante el desarrollo de campañas de publicidad engañosa.
En varios de sus anuncios, la Universidad, cuya casa matriz es la empresa Apollo Education Group, exageró sus vínculos con firmas como Adobe y Microsoft.
En internet, radio y televisión, la casa de estudios afirmó que tales relaciones brindaban oportunidades laborales a sus egresados.
Al cerrar la investigación, la Comisión Federal y el Departamento de Educación determinaron que la institución actuó con dolo, sólo para atraer a nuevos estudiantes.
Las autoridades universitarias han descalificado la pesquisa, asegurando que las acusaciones resultan “inexactas, infundadas o incompletas”.
La administración Biden ha decidido, sin embargo, actuar contra la casa de estudios. En consecuencia, aprobó un plan para condonar 37 millones de dólares en préstamos estudiantiles.
El Gobierno ha argumentado que su decisión se fundamenta en el hecho de que los estudiantes de la Universidad de Phoenix fueron “descaradamente” engañados.
Por su parte, desde la FTC insistieron en que la aparente treta de la institución hace que los alumnos que supuestamente resultaron perjudicados merezcan “un gran alivio”.
La conmutación de la deuda eleva hasta los 117.000 millones de dólares el monto que ha sido aprobado por la actual Casa Blanca para perdonar préstamos estudiantiles.