Javier Milei lo tiene claro. El dirigente conservador, abanderado de La Libertad Avanza de cara a las presidenciales que celebrará Argentina en octubre de este año, no quiere contacto alguno con “comunistas”.
El Político
En tal sentido, Milei, aspirante más votado en las Primarias Amplias, Simultáneas y Obligatorias del pasado 13 de agosto, dijo que, de llegar a la Casa Rosada (la sede del Ejecutivo albiceleste), se desvincularía política y comercialmente de China.
En entrevista para el canal Todo Noticias, el economista y actual diputado nacional aseveró que el régimen de Pekín “asesina” a los ciudadanos que intentan luchar por la libertad.
Milei fue categórico al afirmar que planea evitar “hacer pactos con comunistas”. La eventual medida en materia de política exterior se inscribiría dentro de lo que el propio candidato ha denominado como “lucha global contra socialistas y estadistas”.
Al ser consultado sobre quiénes serían sus aliados, el legislador respondió, sin titubear, que se alinearía con Estados Unidos e Israel.
Para el aspirante, ambos países son clave. De hecho, reconoció que, de llegar a gobernar, ordenará el traslado de la legación diplomática de su país en Israel desde Tel Aviv hasta Jerusalén.
La respuesta de China
En la actualidad, tanto Argentina como Brasil son dos de los socios más importantes de China dentro del espacio iberoamericano.
A mediados de este año, el nivel de intercambio de mercancías entre Buenos Aires y Pekín se situaba en 20.000 millones de dólares.
Mientras los argentinos suelen importar productos electrónicos y químicos, el gigante asiático lleva hasta sus mercados soja y carne producida en Argentina.
En medio de la crisis económica que se vive en el país albiceleste, China permite que sus bienes sean pagados en yuanes, en vez de dólares estadounidenses, para evitarle al Ejecutivo de Alberto Fernández aminorar sus reservas internacionales.
Con tal escenario como telón de fondo, el gobierno comunista chino respondió a las afirmaciones de Javier Milei.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores de la nación asiática alegaron que el candidato presidencial está equivocado y que su visión está alejada de la realidad.
“Si el señor Milei visitara China y experimentara por sí mismo, es probable que llegue a conclusiones muy diferentes sobre la cuestión de la libertad y seguridad del pueblo chino”, indicó Wang Webin, actual canciller de la República Popular China.
El funcionario de alto rango enfatizó que “China es un estado de derecho” y que “la libertad personal de los ciudadanos chinos está protegida por la Constitución”.