La polémica ha sido el signo en la vida de Henry Kissinger. El ex diplomático estadounidense cumple 100 años este sábado y sigue dividiendo opiniones. Unos lo califican como diplomático, otros como belicista. Lo cierto es que encaró un difícil momento durante la llamada "era de la contención" de la Guerra Fría. No cualquiera habría podido estar en sus zapatos.
El Político
Heinz Alfred Kissinger vivía con su familia en Alemania, de donde tuvieron que salir en agosto de 1938. No tuvieron otra opción, dado que eran judíos. Terminaron asentándose en Estados Unidos donde optó por el nombre de Henry, más fácil de pronunciar en el país donde haría su vida.
Se formó en Harvard y pronto fue reconocido como un acucioso investigador. Además, al ser un hombre dotado con una gran inteligencia y sagacidad, en su tesis doctoral plasmó lo que luego sería parte de sus postulados básicos en política internacional.
Dicha tesis fue titulada “Un mundo restaurado: Metternich, Castlereagh y los problemas de la paz, 1812-1822″. En ella sostuvo que la estabilidad es el principal objetivo de la diplomacia, y que debe basarse en el equilibrio de fuerzas.
Diplomacia de doble cara
Para algunos es la viva imagen de la política internacional estadounidense de doble cara. Por una parte combinó un esfuerzo público de normalización con los países comunistas que el propio Kissinger describió como parte del "eje de la historia" y que incluía a China y Rusia en roles estelares.
Pero al mismo tiempo puso en marcha una política secreta contra la expansión de la izquierda en el hemisferio sur. Se le acusa de derrocar a líderes elegidos democráticamente. Toda esa intromisión se produjo pese a que consideraba que el sur carecía de importancia porque el centro del poder estaba en Estados Unidos, Europa y Asia.
Kissinger primero fue asesor de política exterior y luego secretario de Estado de los presidentes Richard Nixon y Gerald Ford. En esos roles contribuyó a poner fin a la guerra de Vietnam, a entrar en una distensión con la Unión Soviética y abrir las relaciones de EE. UU. con China.
A pesar de las críticas, este hombre ofreció "consultoría geopolítica" a decenas de líderes internacionales que se cuidaron mucho de que sus nombres no fuera revelados. Las asesorías se gestionaron con su firma de consultoría Kissinger Associates.
Henry Alfred Kissinger cumple este sábado 100 años. Para conmemorarlo, el Archivo de Seguridad Nacional de EEUU ha publicado una selección de documentos desclasificados que revelan “el lado más oscuro” del poderoso exsecretario https://t.co/3ixJvxKjtx
— EL PAÍS (@el_pais) May 26, 2023
Ucrania y la polémica
Recientemente, Kissinger hizo un llamado a una paz negociada en la invasión de Rusia a Ucrania. Esa apreciación suya sorprendió, porque en ese momento los aliados occidentales de Ucrania empezaban a aumentar sustancialmente su ayuda militar a Kiev. No demoró en producirse la respuesta de Kiev que lo acusó de "apaciguar al agresor".
La reacción crítica de Ucrania fue sorpresiva para Kissinger, el cerebro de la política de distensión de Estados Unidos en los años 70. Un informe de Notimérica indica que más tarde, describió la distensión como "una estrategia para llevar el conflicto con la Unión Soviética" que permitió a ambas partes ganar tiempo para la diplomacia y evitar una guerra.
Kissinger: "Hoy estoy absolutamente a favor de aceptar a Ucrania en la OTAN"
— El Político (@Elpoliticonews) May 26, 2023
Bailar en la cuerda floja
Sus vivencias centenarias le dan el derecho a opinar. Kissinger ha descrito su controvertida visión del liderazgo estratégico como "un baile sobre la cuerda floja". A su juicio, el líder está "suspendido entre las relativas certezas del pasado y las ambigüedades del futuro".
En ese tipo de filosofía, este hombre que fue tan cercano al poder y que también fue el poder en sí mismo, se sentía cómodo al tomar decisiones, detalló DW.
Lo que callaba
Buena parte de las críticas a Kissinger se relacionan con el conflicto en Vietnam. En un principio ocultó a los estadounidenses el bombardeo de Camboya. Estados Unidos quería derrotar al Vietcong, pero acabó permitiendo el ascenso de los Jemeres Rojos.
Intentó poner fin a la guerra de Vietnam mediante un acuerdo de paz que llevó a que le concedieran el Premio Nobel de la Paz por su plan, junto a su homólogo norvietnamita, Lê Đức Thọ. Este último declinó recibirlo y sólo Kissinger lo aceptó.
Posteriormente intentó devolver el premio cuando fracasó estrepitosamente con la caída de Saigón. Las decisiones tomadas costaron muchas vidas en Vietnam, Camboya y la vecina Laos.
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— La Tercera (@latercera) May 20, 2023
El reconocimiento de China
Sus defensores señalan que "siempre pensó en términos de una especie de equilibrio de poder". Se guiaba por el cálculo de que "el dominio de un país produciría resistencias por parte de otros". Sin embargo, algunas de las decisiones que impulsó generaron complicaciones a largo plazo.
Evitar ese tipo de reacción en cadena que podría producir inestabilidad es lo que llevó a Kissinger a mediar en el histórico reconocimiento de China por parte del presidente Nixon en 1972. Ese hecho es el que sigue vinculando a Estados Unidos a su compromiso de que "Taiwán es parte de China".
Fuente: Europapress