El expresidente Donald Trump advirtió este viernes de la «potencial muerte y destrucción» que habría en EEUU si finalmente es imputado por la Fiscalía de Nueva York por el presunto pago a la actriz porno Stormy Daniels a cambio de su silencio.
El Político
En un mensaje publicado este viernes en su red social Truth Social, Trump afirmó que el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, lo acusa de un «cargo falso» por el que, si es imputado, podría desencadenarse una violencia «catastrófica» en Estados Unidos.
Según el político y empresario de 76 años, su imputación puede buscarla "solamente un degenerado psicópata que verdaderamente odia a los Estados Unidos", en alusión al fiscal Alvin Bragg que fue quien inició el caso y pidió al gran jurado que estudie si sigue adelante con la instrucción del caso, algo que no se sabrá al menos hasta la semana próxima.
¿Por qué es importante?
La retórica de Trump ha alarmado a algunos espectadores, que la compararon con los llamamientos del expresidente a sus partidarios para que viajaran a Washington D.C. antes del 6 de enero de 2021, cuando los alborotadores irrumpieron en el edificio del Capitolio para intentar detener la certificación de los resultados de las elecciones de 2020, reportó TheHill.
En su post, Trump insiste en varias ideas repetidas una y otra vez desde que abandonó la presidencia: que tuvo más votos que cualquier presidente en toda la historia (aunque fue superado por Joe Biden, a quien niega la legitimidad electoral) y que "es un hecho conocido que no se cometió (por su parte) NINGÚN delito".
La publicación de Trump marcó una escalada en la andanada de ataques del exmandatario contra el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, mientras un gran jurado está sopesando si acusar a Trump sobre los pagos de dinero por silencio realizados a una estrella porno para mantener en silencio una supuesta aventura durante la campaña de 2016.
También es probable que alimente aún más las preocupaciones de que Trump está avivando la violencia antes de los posibles cargos.
En contexto
El escándalo por el posible pago secreto de 130.000 dólares a Stormy Daniels por parte del exabogado de Trump, Michale Cohen, podría desembocar en la acusación e incluso detención del expresidente, quien sería el primer exmandatario en enfrentarse a cargos incriminatorios, que a su vez tumbarían sus aspiraciones de retornar a la Casa Blanca en 2024.
Ya la semana pasada, el exmandatario alertó de su detención inminente e incluso fijó su posible arresto para el martes, algo que finalmente no ocurrió.
Bragg, que fue quien inició el caso y pidió al gran jurado que estudie si sigue adelante con la instrucción, declinó hacer cualquier declaración al respecto, según consignó la agencia de noticias Europa Press.
Múltiples medios informaron en las últimas semanas que una acusación contra Trump podría ser inminente en la investigación de Manhattan.
El sábado pasado, Trump predijo en Truth Social que sería arrestado el martes siguiente, aunque sus asesores dijeron que la publicación no se basaba en ninguna advertencia previa.
Al mismo tiempo, Trump comenzó a instar a sus seguidores a protestar y "recuperar nuestra nación" en respuesta a una acusación.
Trump tiene previsto celebrar un mitin el sábado en Waco (Texas).
Entre líneas
La animadversión de Trump hacia el fiscal Bragg ya tiene tintes personales: ayer, lo llamó "un animal apoyado por (el financiero) Georges Soros a quien no le importa lo que está bien ni mal, y le da igual a cuánta gente pueda herir".
Bragg, que en los pasados días ha sido asediado por la prensa que se apostó desde el lunes junto al tribunal donde el gran jurado debe comunicar su decisión, ha declinado hacer cualquier declaración con respecto al caso.
En conclusión
Algunos republicanos, entre ellos el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, han tratado de mitigar los llamamientos de Trump a las protestas.
El gran jurado de Manhattan no se reunió el miércoles ni el jueves, y no se espera que se presenten cargos hasta la próxima semana como muy pronto.
Bragg dijo en un memorando interno al personal que no se dejará intimidar por la retórica de Trump.
En respuesta a una carta de los republicanos de la Cámara de Representantes para que testifique, Bragg argumentó que el expresidente "creó una falsa expectativa de que sería arrestado" con su publicación Truth Social del pasado fin de semana.
No obstante, la pasada semana su oficina emitió un comunicado en el que decía que continuará «aplicando la ley con equidad y justicia», y que hablaría solo «cuando sea apropiado».
«No toleraremos intentos de intimidar a nuestra oficina o de amenazar el imperio de la ley en Nueva York», rezaba la nota.
Además de la investigación de Manhattan, el Departamento de Justicia está sondeando a Trump por su manejo de documentos clasificados al dejar la Casa Blanca, así como por su conducta en torno a los disturbios del 6 de enero.