El intercambio de oro, explotado de manera ilegal en el Arco Minero del Orinoco, bajo la complacencia del gobierno de Nicolás Maduro Moros funcionarios y familiares, por petróleo se ha incrementado entre Irán y Venezuela.
El Político
Los diversos servicios secretos israelíes llevan años detrás de la pista del financiamiento del partido libanés Hezbolá, de tendencia proiraní.
Este grupo es una de las muchas organizaciones que controla la República Islámica a lo largo de la región para afianzar su influencia.
En esta ocasión, también colaboraron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), la Oficina Nacional de Lucha contra la Financiación del Terrorismo de Israel, la fiscalía y la policía; en una investigación conjunta que desnuda o da a conocer la "ruta de oro" que Irán utiliza para financiar a su apoderado terrorista Hezbolá en Líbano, informó el domingo Walla.
¿Por qué es importante?
Un documento firmado por el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, revela que decenas de kilogramos de oro fueron introducidos de contrabando desde Venezuela a Irán a través de un vuelo de Mahan Air con destino a Teherán, donde el metal precioso fue vendido y las ganancias enviadas a Hezbolá, que mantiene estrechos vínculos con el propio régimen venezolano.
El principal protagonista de esta actividad ilegal, según informaron los organismos de seguridad israelíes, es Badr ad-Din Naimi Mousavi, un empresario iraní cuyas empresas legítimas incluyen dos negocios inmobiliarios en el Reino Unido y una empresa de comercio internacional en Dubai.
Según las fuentes, Mousavi es también miembro de la Fuerza Quds y utiliza sus contactos empresariales y políticos en Venezuela para hacer llegar el oro a Teherán por vía aérea.
Aseguradora internacional y oposición iraní también denuncian
No es la primera vez que se hace pública esta actividad de contrabando. El pasado mes de diciembre, el grupo opositor Iran International, acompañó en su denuncia a la compañía de seguros marítimos Lloyds avisó a sus clientes en una advertencia confidencial de que el IRGC y Hezbolá estaban eludiendo las sanciones mediante un acuerdo de Irán con Caracas para pagar en oro los productos petrolíferos que envía a Venezuela.
Una vez que el oro llega a Teherán, se envía a Turquía para su venta y, a continuación, el dinero blanqueado va a parar a la organización terrorista libanesa, según el grupo opositor.
Conclusión
El pasado mes de junio, los dos países firmaron en Teherán un acuerdo de cooperación de 20 años, y en septiembre se reveló que el régimen de Maduro había concedido casi 4.000 millas cuadradas de tierras agrícolas a Teherán.
Aunque aparentemente se destinaron a cultivos para alimentar a los iraníes, teniendo en cuenta los estrechos vínculos del gobierno con Hezbolá, se planteó la posibilidad de que, al menos en parte, se utilizaran para entrenar en secreto a Hezbolá y a las fuerzas de la IRGC.