El caos reina en la red social Twitter desde que fue adquirida por Elon Musk. La empresa dijo que cerraría todas sus oficinas hasta el lunes.
El Político
Así se desprende de un correo electrónico compartido por un empleado saliente, después de que una nueva ola de empleados renunciara cuando Elon Musk emitió un ultimátum diciéndoles que tendrían que estar dispuestos a comprometerse con un ambiente de trabajo "duro".
"Por favor, continúe cumpliendo con la política de la compañía absteniéndose de discutir información confidencial de la empresa en los medios sociales, con la prensa o en cualquier otro lugar", decía el correo electrónico compartido con CNBC el jueves.
Los mensajes internos de Slack también compartidos con CNBC mostraban a ingenieros y otros empleados publicando mensajes de despedida en un grupo de chat "watercooler" en el período previo a la fecha límite de las 5 p.m. ET del jueves que Musk estableció el miércoles.
Cientos de emojis de saludo (que transmiten el mensaje "gracias por tu servicio") pasaron por allí, junto con docenas de mensajes de despedida.
What do people mean when they say Twitter is gonna shut down? Doesn’t it kinda run itself? I feel like engineers are for changes not to just keep it running? I also don’t know anything. Hey @elonmusk wanna do a Twitter space with me? Im confused.
— Dave Portnoy (@stoolpresidente) November 18, 2022
¿Por qué es importante?
Tres empleados de Twitter que hablaron con CNBC pidieron permanecer en el anonimato, citando el miedo a las represalias profesionales. Los tres tenían previsto dimitir el jueves. No estaba claro exactamente cuántos empleados renunciaron.
"El tren ha comenzado en #social-watercooler", dijo uno de los empleados, en referencia a una sala de Slack que los empleados de Twitter han utilizado en las últimas semanas para notificar a otros que se van.
Vale recordar que Musk envió un correo electrónico a toda la compañía el miércoles diciendo a los empleados que esperaran "largas horas a alta intensidad" si querían quedarse. Dijo que tenían hasta las 5 p.m. ET del jueves para decidir.
Muchos de esos empleados han publicado vídeos en la red social a modo de despedida o manifestando su malestar con el nuevo rumbo de la empresa.
Abundan los llamamientos a la emigración a otras plataformas como Mastodon o a foros del estilo Reddit.
También hay numerosos tuits a modo de despedida de Twitter, como si fuera a colapsar de forma inminente, ensalzando todo lo bueno y lo malo que nos ha aportado.
La salida de la empresa de tantos ingenieros está dando lugar a rumores sobre la fragilidad de la plataforma ante posibles ataques de ciberdelincuentes o acerca de su propia viabilidad tal y como la conocemos hoy.
Entre líneas
El magnate tecnológico ha revolucionado la plataforma con cada tuit que ha publicado desde que asumió el control de la compañía: servicio premium por ocho dólares mensuales, cambio en la política de moderación de contenidos, despidos masivos… Pero en las últimas horas se han precipitado las cosas.
Cientos de trabajadores han rechazado el ultimátum que dio a la plantilla y que expiraba el jueves para que quienes no quisieran seguir en el barco se fueran, reportó ElPais.
Twitter's San Francisco headquarters has gone hardcore tonight. #TwitterTakeover pic.twitter.com/DoG5pDD4AD
— Muskrat McRatfu*ker needs to resign as CEO (@christoq) November 18, 2022
En conclusión
La reciente oleada de dimisiones se suma a lo que ahora es una combinación de despidos masivos y éxodo voluntario de Twitter, dejando a la compañía significativamente más pequeña que cuando Musk se hizo cargo de ella a finales del mes pasado.
Un ingeniero dijo que las renuncias habían afectado a partes importantes de la operación de ingeniería de la compañía.
"Equipos enteros que representan la infraestructura crítica están abandonando voluntariamente la compañía, dejando a la empresa en grave riesgo de poder recuperarse", escribió a CNBC el ingeniero, que dijo que presentaba su renuncia el jueves.
El ingeniero añadió que muchos de los que dejan Twitter no sentían la necesidad de quedarse y que sólo sabían de dos personas que se quedaban, una de ellas porque la empresa patrocinaba su visado estadounidense.
"Somos profesionales cualificados con muchas opciones, por lo que Elon no nos ha dado ninguna razón para quedarnos y muchas para irnos", escribieron.
Por su parte, Elon Musk permanece aparentemente impasible ante la situación. Su actividad en Twitter, apenas interrumpida, permite pensar que no duerme: no pasan más de dos horas sin que se pronuncie en su red social.
Ha dicho, entre otras cosas, que no le preocupa la estampida de trabajadores porque, en su opinión, se están quedando los mejores.