El exembajador contra la Trata de EEUU, John Richmond, aseguró que la trata de personas recauda alrededor de 152 miles de millones de dólares.
El Político
Además, señaló que "hay una urgencia respecto a este tema. Entre la batalla que libran los traficantes y el gobierno, los traficantes están ganando … Estamos persiguiendo víctimas, en lugar de los traficantes".
El abogado y diplomático también aseguró que "ninguna víctima debería se perseguida, en la clase de comportamiento por tratar de sobrevivir".
Persecución del tráfico humano en EEUU
Richmond afirmó que, desde 2015, la persecución del tráfico humano ha caído un 40% y aseguró que ese problema no se debe a la pandemia, sino que ya estaba presente, reportó la BBC.
El exembajador también señaló que en países como Chile, Corea de Sur, Suiza, Bulgaria, Bélgica, Japón, Kosovo, Malta, Eslovaquia, Ucrania, entre otros, se deja operar con cierta impunidad a la mayoría de los traficantes humanos. Por eso, dijo, es necesario que los gobiernos aborden este asunto.
"Este tipo de acciones me parecen sumamente importantes. Aunque nos parezca un problema ajeno a nosotros, no es ajeno a nosotras", dijo Carola, una de las víctimas de este delito, al comienzo del evento. "Mis compañeras y yo pasamos en frente de tantos ojos que pudieron haber hecho algo".
Destino en Estados Unidos
Según el Departamento de Estado de EEUU, los Estados Unidos en un país destino para miles de hombres, mujeres y niños que son objetos de trata, procedentes de todas partes del mundo.
Estas víctimas son sujetas a la explotación sexual y laboral. Más aún, muchas de estas víctimas son engañadas con falsas promesas e invitadas a abandonar sus hogares por supuestos trabajos rentables; en cambio, ellas terminan viéndose obligadas o coaccionadas a ejercer la prostitución, servidumbre doméstica, trabajos en fábricas, granjas, fincas u otros tipos de trabajo forzoso.
Las víctimas se encuentran frecuentemente en un país extranjero donde no hablan el idioma. Los tratantes frecuentemente les quitan los documentos de viaje e identidad a las víctimas, diciéndoles que si intentan escapar, se les hará daño a ellas mismas o a sus familias en casa—o que las familias de las víctimas asumirán la deuda.
Reconocemos que hombres, mujeres y niños que son encontrados en prostíbulos, talleres clandestinos, salones de masaje, terrenos agrícolas y otros mercados laborales puede que hayan sido obligados o coaccionados a esos tipos de situaciones, por lo que pudieran ser posibles víctimas de trata.