La más agresiva escalada conocida hasta ahora en la investigación sobre los intentos para torcer el resultado de las elecciones presidenciales de 2020 en favor de Donald Trump, se lleva a cabo por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
El Político
El entorno de Trump, quien está lidiando con varios frentes legales diferentes, ahora parece estar frente a una enorme pesquisa del Departamento de Justicia que se mueve para investigar casi todos los frentes de los intentos por dar vuelta la elección presidencial.
La investigación sobre los esfuerzos para alterar las elecciones presidenciales que Trump perdió en 2020 está moviéndose fuertemente en todas las direcciones… lo que incluye en dirección a Trump, reportó Univision.
Funcionarios del Departamento de Justicia confiscaron los teléfonos de dos importantes asesores del expresidente y enviaron cerca de 40 citaciones en torno a esta investigación.
¿Se busca información sobre Trump?
Los investigadores buscan información sobre diferentes frentes, incluida la trama llamada de ‘electores falsos’.
Algunas citaciones, sin embargo, buscan información sobre comité de acción política (PAC, por sus siglas en inglés) Save America, el principal recaudador de fondos para Trump. Esto se debe a que buscan saber cómo fluyó el dinero para apoyar los esfuerzos para alterar la elección.
Los colaboradores de Trump a quienes les confiscaron los teléfonos son Boris Epshteyn, un abogado del expresidente que sigue siendo cercano a él, y Mike Roman, un estratega de campaña de Trump que dirigía operaciones el día de la elección en 2020. Ambos están vinculados a una de las maniobras para tratar de mantener a Trump en el poder y en el esfuerzo por nombrar las listas de ‘electores falsos’.
¿Cuántas investigaciones hay del asalto al Capitolio?
La investigación sobre el asalto al Capitolio y los intentos por revertir las elecciones tiene dos frentes bien diferentes.
Por un lado, se conformó un Comité Selecto de la Cámara de Representantes para investigar la insurrección y el rol de Trump. El panel indicó que Trump incitó una "insurrección" y que el ataque violento fue parte de una trama más grande que incluía sembrar falsedades sobre fraudes, presiones a funcionarios estatales que estaban a cargo del conteo de votos en estados disputados y otras maniobras. Pero más allá de la profunda investigación, el Comité Selecto no puede acusar o enjuiciar al expresidente.
Por otro lado, el DOJ lleva su investigación y esta sí tiene consecuencias o puede tenerlas.
El DOJ hace una pesquisa sobre el asalto al Capitolio y los intentos de interferencia electoral que ha tenido tres frentes conocidos hasta ahora: una centrada en los atacantes del 6 de enero; la otra investiga a presuntos conspiradores que posiblemente buscaron generar fraude con listas de falsos electores; y la tercera que llega hasta el mismo entorno de Trump y sus intentos por alterar el resultado de una elección democrática.
¿Está Trump en la mira del Departamento de Justicia?
El DOJ comenzó a emitir citaciones desde hace unos meses de un gran jurado (ante quien se presentan materiales y deciden si hay evidencias suficientes para iniciar un juicio). Luego, comenzaron a elevar el objetivo de las citaciones y comenzaron a enviarlas a legisladores estatales y funcionarios republicanos estatales aliados de Trump que participaron en el plan de listas de electores falsos.
En la investigación del gran jurado se buscó información que toca hasta Rudy Giuliani, quien actuaba como abogado de Trump, y John Eastman, señalado como el estratega detrás de la idea de que el entonces vicepresidente Mike Pence podría rechazar la certificación de la victoria de Joe Biden.
El teléfono de Jeffrey Clark, un abogado que apoya las teorías conspirativas de Trump y a quien el expresidente había querido poner como fiscal general interino tras la renuncia de William Barr, también fue incautado.
Entre los testigos ante ese gran jurado, acudieron dos importantes asesores del exvicepresidente Mike Pence, según se supo meses atrás.