La viceministra de Relaciones Exteriores de Cuba, Josefina Vidal, afirmó el martes que EEUU tiene una política migratoria “incoherente” y “diferenciada”.
El Político
En esa línea, la diplomática cubana instó a Washington a cumplir los acuerdos bilaterales en la materia como una forma de enfrentar el incremento de tráfico irregular hacia el vecino país.
Nueva ronda de conversaciones migratorias
Los comentarios de Vidal se produjeron el mismo día del anunció de la celebración esta semana de una nueva ronda de conversaciones migratorias entre ambas naciones, paralizadas durante cuatro años, reportó LATimes.
En entrevista con @ARodriguezAP y @CNN_Oppmann, ratifiqué compromiso de #Cuba?? con los acuerdos migratorios suscritos con #EEUU para garantizar una emigración regular, segura y ordenada, y la voluntad de sostener rondas de conversaciones habituales en esta área de interés común pic.twitter.com/MbGFLLvWx7
— Josefina Vidal (@JosefinaVidalF) April 19, 2022
La reunión se realizará en Washington
La cancillería cubana indicó en su cuenta de Twitter que la reunión se realizará en Washington el jueves y que estará encabezada por el viceministro Carlos Fernández de Cossio.
El encuentro se producirá en momentos en que se registra un incremento dramático de los arribos de cubanos a la frontera sur de esa nación.
Ayuda económica de EEUU
EEUU “está proveyendo económicamente a muchos países de la región para reactivar sus economías, para ayudarlos a generar empleos”.
Así lo informó Vidal planteó Vidal a un reducido grupo de periodistas en La Habana. Señaló que este país está apoyando proyectos de salud y educación.
En el caso de Cuba, la política desde Washington es exactamente la contraria, “de máxima presión en el orden económico y por medio de medidas coercitivas”, agregó.
La última ronda de conversaciones, que según los acuerdos entre ambas partes deben realizarse dos veces al año, se produjo en julio de 2018, bajo la administración del entonces presidente Donald Trump.
El expresidente Trump dio un giro radical a la política de acercamiento entre ambas naciones iniciada por su predecesor Barack Obama.
Trump incrementó las sanciones contra la isla en todas las esferas
Trump incrementó las sanciones contra la isla en todas las esferas desde la cancelación de los permisos para envío de remesas o los cruceros y la persecución a empresas de terceros países que operaran con Cub.
También limitó los vuelos y castigó a los buques petroleros destinados a la nación caribeña. Todo ello con el fin de lograr un cambio de modelo político.
Crisis económica en Cuba
Estas medidas y la pandemia contribuyeron a generar una crisis económica en Cuba con desabastecimiento de productos básicos, cortes de luz y las respectivas colas o racionamientos, según las autoridades.
La mayoría de los migrantes mencionan razones financieras para viajar a Estados Unidos, otros alegan disidencia política y contar con asilo.
EEUU retiró en 2017 al personal de su embajada
“No vemos ningún tipo de justificación para que todas las visas a emigrantes cubanos no se den en La Habana y se obligue a la mayoría de los cubanos a desplazarse con los costos que eso implica”.
Así lo agregó Vidal, quien fuera en su momento la jefa de las negociaciones del histórico acercamiento con Estados Unidos en 2014.
Ese proceso de negociación concluyó con la reapertura de las sedes diplomáticas y el viaje de Obama a la isla.
Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos en los últimos seis meses se produjeron 79.800 detenciones de cubanos —algunas personas podrían intentar varias veces el ingreso— en la frontera terrestre, un poco más del doble de todo el año fiscal –de octubre a septiembre– 2021 y cinco veces más que el 2020.
Vidal reiteró que junto a la paralización consular, Estados Unidos incumple desde hace cinco años el acuerdo de los años 90 por el que se obliga a otorgar 20.000 visas anuales.
También se incrementaron las travesías por mar, sea en rústicas embarcaciones o a manos de traficantes. Desde octubre a la fecha, la Guardia Costera de los Estados Unidos interceptó a 1.257 cubanos, contra 838 del 2021.
Salidas superiores a las de la llamada “crisis de los balseros” de 1994
Tal como están las cifras la cantidad de salidas es superior a la llamada “crisis de los balseros” de 1994 cuando llegaron por el Estrecho de la Florida unas 30.000 personas y la mitad de los que lo hicieron a través del éxodo del Mariel en 1980, cuando se marcharon unos 124.000 cubanos.
Vidal refirió que históricamente hay picos migratorios –o sea incrementos en las salidas– cuando Estados Unidos incumple los acuerdos, recrudece las sanciones económicas contra la isla y pone trabas para una tramitación más o menos normal de las visas de los ciudadanos isleños
Además, “Estados Unidos está ejerciendo presiones sobre países de la región para que establezcan requerimientos específicos para los viajes de los cubanos en tránsito y lo que adicionalmente genera obstáculos”, manifestó.
La funcionaria rechazó adelantar la agenda que Cuba llevará a la ronda, pero indicó este tema estará entre los mencionados.
En los últimos meses Panamá y Costa Rica, por ejemplo, anunciaron que exigirán a los cubanos visas de tránsito, una posición diferente a la de Nicaragua –aliada de Cuba– que levantó este requerimiento y se convirtió desde noviembre en el nuevo punto de salida de isleños hacia Estados Unidos.
“Para Cuba los acuerdos son importantes”, explicó Vidal, quien exhortó a Estados Unidos a cumplir su parte por el bien de ambas naciones y de toda la región.
Los únicos puntos a tratar con la dictadura son:
-Liberación inmediata de todos los presos políticos
-Respeto a los DDHH de los cubanos incluidas las elecciones libres
Claro, que estos?no van en la conversación, son condiciones antes de sentarse. Y se acaba la crisis migratoria pic.twitter.com/JkYkqBZbdy— Rosa María Payá A. (@RosaMariaPaya) April 19, 2022
Reuniones de Cuba con otros países
Cuba mantuvo en este tiempo reuniones migratorias con países como Canadá, Belice y hace menos de un mes con México, en cuyas fronteras se agolpan los isleños luego de realizar periplos más o menos irregulares –plagados de contrabandistas y rutas peligrosas– con el objetivo de ingresar a Estados Unidos.