Descongelar fondos por ingresos petroleros y las cuentas de funcionarios muy cercanos al régimen dictatorial de Nicolás Maduro, sería la tarea encomendada al embajador venezolano en la Federación Rusa, Carlos Farías.
Mario A. Beroes R./El Político
La semana pasada el régimen de Nicolás Maduro solicitó a su par ruso que descongele los ingresos petroleros que permanecen en varios bancos rusos.
Estos activos están incluidos en la lista negra de bancos del gobierno de EEUU.
Los jerarcas gubernamentales están especialmente preocupados por los fondos que están en el Promsvyazbank (PSB), ya que las cuentas bancarias de la estatal petrolera PDVSA y el Ministerio de Defensa están ahi.
Sin contar varias cuentas personales de la "elite madurista", actualmente en funciones de gobierno.
2019: Las sanciones
Producto de las sanciones de Estados Unidos a Venezuela, en el año 2019 el Evrofinance Mosnarbank, fue incluido en la lista negra estadounidense de entidades financieras.
Esto hizo que que PDVSA tuviera que mover sus cuentas de cobros a otros bancos y el ruso fue uno de ellos.
La solicitud se conoce después de las conversaciones realizadas entre Nicolás Maduro y su vicepresidenta Delcy Rodríguez, con funcionarios estadounidenses el pasado domingo 6.
Los enviados de la administración Biden ofrecieron como concesión, considerar la posibilidad de permitir temporalmente a Venezuela el uso del sistema SWIFT, del cual por cierto, el mismo Maduro "se alegró" de que el país no estuviese suscrito.
Con el sistema el régimen madurista podría realizar transacciones financieras y mover dinero a otras cuentas en bancos de todo el mundo.
Según fuentes cercanas al régimen, y en vista de la posibilidad de que las conversaciones con la Casa Blanca vuelvan a caer en punto muerto.
Pero el canciller Felix Plascencia, por órdenes de la vicepresidenta Delcy Rodríguez, le ordenó al embajador venezolano "conseguir como sea", que Rusia descongele los activos venezolanos.
"De todo como en botica"
Esas mismas fuentes confirmaron que en la reunón efectuada en el Palacio de Miraflores, se trataron diversos temas, "algunos álgidos" entre ambas naciones.
Desde establecer un acuerdo para que en el país se celebren elecciones presidenciales libres, una amplitud de reformas a la industria petrolera venezolana, alejamiento del régimen ruso, la libertad de los ejecutivos petroleros y del mariner Luke Alexander Denman.
También la posibilidad de reestablecer relaciones diplomáticas, hasta las relaciones con Brasil y Colombia estaban pautados en la agenda.
Obvio que no hubo tiempo para todos, aunque se ha colado que el tema petrolero, el electoral y la posible libertad de los ciudadanos estadounidenses habrían sido los realmente conversados entre ambas delegaciones.
Igualmente buscaron que el régimen de Maduro emita un rechazo a la invasión rusa a suelo de Ucrania.
La reunión de Caracas la solicita el régimen de Maduro, a través de la firma de abogados multinacional Dentons y no sobrepasó las tres horas de duración.
Por cierto, dicho bufete es el que utiliza el régimen de Venezuela para negociaciones de deudas, entre otros aspectos legales.