Como resultado de un simulacro o también llamado juego de guerra realizado por expertos en política exterior y defensa, si China decide adueñarse de una de las islas periféricas de Taiwán, Estados Unidos tendría pocas opciones de respuesta, sin arriesgarse a una gran escalada bélica entre superpotencias.
El Político
La cadena de noticias CNN reseña datos relevantes de un informa elaborado por Center for a New American Security, el cual esbozó un escenario para evaluar el uso de la fuerza militar por parte de China. Esto en el caso de intentar tomar el control de Dongsha, un diminuto atolón situado en el Mar de China Meridional, entre Taiwán y Hong Kong. Allí permanecen estacionadas unas 500 tropas taiwanesas.
Consistiría en una prueba para posteriormente apropiarse de otras islas cercanas a Taiwán. E incluso, de una invasión total del territorio del país vecino, ya que Beijing pretende poner a prueba y provocar la determinación de Washington de defender a Taiwán.
En resultado del ensayo indica que una vez que China establezca su propia huella militar en Dongsha y obligue el retiro de las tropas taiwanesas, Estados Unidos no tendría ninguna forma creíble de obligar a China a devolver la isla al control de Taipei.
A recent wargame by The Gaming Lab at CNAS details the outcomes of a virtual strategy game, which saw the U.S. team relying on military force in ways that were risky and would be difficult to sustain.https://t.co/K94xsCmpaa
— CNAS (@CNASdc) October 27, 2021
Taiwán entre dos aguas
Se estima adicionalmente que las sanciones económicas se llevarán algún tiempo demasiado como para surtir efecto. Además parecen ser demasiado dóciles en un intento de influir en la toma de decisiones de China. Y cualquier acción militar supone el riesgo de una escalada bélica, que tanto Estados Unidos como Taiwán desean evitar.
El informe subraya sobre la necesidad de un enfoque multilateral, sugiriendo que Estados Unidos, Taiwán, Japón y otros trabajen para disuadir a China de tomar la isla en primer lugar.
De esta manera Estados Unidos y Taiwán deben empezar a coordinarse desde ahora si es que desean construir una disuasión creíble contra una agresión o coerción china limitada hacia Taiwán". En todos los escenarios, la cooperación con Japón resulta crucial para establecer una disuasión eficaz.
Así continúa el juego de guerra
En este contexto, Beijing ha incrementado la presión militar sobre la isla asiática en las últimas semanas. De su lado, el ministro de Defensa de Taiwán formuló al comenzar este mes principios de este mes una funesta predicción: en 2025. Manifestó que China será capaz de organizar una invasión "a gran escala" de Taiwán. El denominado juego de guerra se centró en una invasión de Dongsha en 2025.
La semana pasada, el presidente estadounidense Joe Biden declaró que Estados Unidos se comprometía a acudir en defensa de Taiwán si era atacado por China. Sus comentarios aparentan oponerse a la política declarada por Estados Unidos de "ambigüedad estratégica".
Consultado sobre si la potencia norteamericana protegería a Taiwán en caso de ataque de China, Biden dijo que lo haría. "Sí, tenemos el compromiso de hacerlo", sentenció.
Fuente: CNN