La vida supera en belleza a la fantasía, por lo que apenas se requiere de una sensibilidad poética para traducirla en argumento de historias eternas. La historia de amor de la princesa de Japón y el plebeyo parece de las pantallas de cine.
El Político
Los emperadores, reyes y monarcas de todas las épocas han tenido una existencia presencial para los pueblos. Y otra íntima que sólo se conoce tangencialmente o que se ignora por los secretos de palacio.
Princesa y plebeyo en Japón
La introducción viene a cuento por la decisión de la princesa Mako de Japón de renunciar a su título real para casarse con un “plebeyo”: Kei Komuro. Quien trabaja en un bufete de abogados.
Se conocieron mientras los dos eran estudiantes de la Universidad Cristiana Internacional de Tokio.
Sin embargo, ella no es la primera princesa japonesa en hacerlo. La princesa Sayako la hija menor de los que fueran emperadores de Japón Akihito y Michiko, renunció a sus títulos por amor.
Fue en el año 2005, cuando decidió casarse con el funcionario municipal y urbanista Yoshiki Kuroda. Desde hace dos años es la suma-sacerdotisa del Gran Santuario de Ise, una posición que heredó de su tía.
De película …¡Pero no en Japón!
Pero la renuncia a la corona por amor más famosa de la historia se vivió en occidente. En 1936, solo 325 días después de ascender al trono, el rey Eduardo VIII, Duque de Windsor, leyó su renuncia en directo en la BBC.
Su decisión de proponerle matrimonio a Wallis Simpson, estadounidense y dos veces divorciada, provocó una crisis constitucional. Decidido a darle el ‘sí quiero’ a Simpson.
Abdicó y fue sucedido por su hermano menor, padre de la actual Reina Isabel, que pasó a ser Jorge VI.
El Príncipe Harry y Meghan
Y sin hurgar demasiado en la historia tenemos en el presente al príncipe Harry en sus amores demasiado comentados con la norteamericana Meghan Markle.
Por seguirla ha marcado distancia con la familia real y vive en los Estados Unidos
Definitivamente, la realeza y el amor andan separados, a menos que sean clandestinos