Esta semana llegó a un momento crucial los esfuerzos del Congreso para cambiar la forma en que los militares manejan las agresiones sexuales en sus filas. Este debate tenía años de resistencia por parte de funcionarios y legisladores del Pentágono. Conozca los detalles.
El Político
En el 2019 fue asesinada la soldado Vanessa Guillén en la base militar de Fort Hood (Texas). Esta situación abrió una herida mortal en el trato de los agresiones sexuales en el ejército.
Por el homicidio de Vanessa Guillén enfrentaron acciones disciplinarias más de veinte oficiales y suboficiales del Ejército de EE.UU., así lo indicó una fuente de ese cuerpo militar en su momento.
El informe, sin embargo, no hizo públicos los nombres de los militares, siguiendo el protocolo que impera en el Ejército. No obstante aseguró que Guillén fue acosada sexualmente, como ella misma había relatado a su madre meses antes de su desaparición.
Este caso fue el detonante para que la Cámara y el Senado empezaran a tomar decisiones. A partir de es momento realizaron propuestas sobre el manejo de las agresiones sexuales en el ejército.
Proyectos de ley sobre agresiones sexuales tiene apoyo de legisladores
Varios proyectos de ley presentados en la Cámara y el Senado cuentan ahora con el apoyo de legisladores que antes no opinaba sobre las agresiones sexuales en el ejército.
Estas posturas generaron esperanzas entre los defensores porque creen que -finalmente- tomarán medidas para abordar este problema.
Turner: Propuesta para renovar cómo se manejan las denuncias
El representante republicano por Ohio, Mike Turner, fue uno de los que se mostró optimista .¿El motivo? Anunció que lideraría una propuesta de la Cámara para renovar la forma en que se manejan las denuncias de agresiones sexuales en el sector militar, reportó The Hill.
Turner, quien es miembro del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, declaró que presentaría una legislación con un colega demócrata.
Su objetivo es cambiar quién decide en los juicios de agresiones sexuales y otros delitos graves en el ejército.
El congresista republicano cree que es vital sacar la decisión de los comandantes militares. A su juicio, este tipo de casos debe ser colocado| en manos de fiscales militares especialmente capacitados.
Complemento del proyecto de ley bipartidista del Senado
Cabe destacar que ese nuevo legislación complementará el proyecto de ley bipartidista del Senado conocido como la Ley de Mejoramiento de la Justicia Militar y Mayor Prevención (MJIIPA).
La MJIIPA fue apoyada por 61 senadores republicanos y demócratas el pasado jueves.
Esta votación significa que el proyecto de ley puede sobrevivir si el Senado la obstruye, Ya que la regla en el Hemiciclo es que la legislación debe ser apoyada por al menos 60 senadores para poder avanzar.
¿Sacar o no a los comandantes de la decisión en casos de agresión sexual?
Por su parte, la senadora por Nueva York, Kirsten Gillibrand ha intentado durante años sacar a los comandantes del proceso de decidir si enviar los casos de agresión sexual a juicio, pero otros legisladores la bloquearon repetidamente, destacó The Hill.
Las objeciones a esta demócrata era que si se cambiaba quien tomaba esa decisión, podría colapsar la unidad de los funcionarios del Pentágono.
¿Y la postura de Turner?
Turner, quien también es copresidente del Caucus de Respuesta y Prevención de Agresión Sexual Militar de la Cámara de Representantes, anteriormente se opuso a varias versiones del cambio de esta legislación.
Pero su apoyo a este nuevo anteproyecto es una gran victoria para el esfuerzo de casi una década de Gillibrand, destacó The Hill.
Según los analistas, el respaldo de Turner obligará a otros republicanos de la Cámara a ayudar a llevar el proyecto de ley a la meta, y convertirlo en ley.
“Ahora tenemos 61 copatrocinadores bipartidistas, probablemente tengamos más de 70 partidarios del proyecto de ley. Esperamos poder obtener una votación en el piso, hacia arriba o hacia abajo, para que podamos comenzar el proceso de elaboración de esta ley ”, comentó Gillibrand.
Aumentan casos de agresión sexual dentro del ejército de EE.UU.
Los informes de agresión sexual dentro del ejército han aumentado constantemente desde 2006; e incluso se incrementaron en el 2020 durante la pandemia del coronavirus; en ese momento los movimientos e interacciones de las tropas a nivel mundial fueron limitados debido a la crisis sanitaria.
Numerosos programas y esfuerzos del Pentágono para reducir tales casos se han quedado cortos.
Ese fracaso se puso de manifiesto el jueves cuando el Departamento de Defensa publicó su informe anual sobre agresión sexual en el ejército. La encuesta anual encontró que los miembros del servicio informaron 6.290 incidentes de agresión sexual mientras estaban en servicio en el año fiscal 2020, un 1 por ciento más en comparación con el año fiscal 2019.
Milley: " 20.000 hombres y mujeres fueron agredidos sexualmente en el ejército estadounidense"
Los legisladores siguen adelante con los cambios propuestos; además cuentan con el respaldo de la administración Biden.
El nuevo gobierno se ha comprometido a "poner fin al flagelo de la agresión sexual" en las filas del ejército.
El presidente del Estado Mayor Conjunto, el general Mark Milley, quien hace poco retiró su objeción a enjuiciar las agresiones sexuales fuera de la cadena de mando del ejército, declaró que las encuestas internas revelaron que aproximadamente 20.000 hombres y mujeres fueron agredidos sexualmente en el ejército estadounidense el año pasado.
“Esa cifra es enorme, eso es significativo. Y ese número no se ha reducido significativamente con el tiempo. Así que tenemos que analizarlo detenidamente. … Estos son ataques de azul sobre azul, no se puede soportar, tiene que resolverse, así que sí, mi mente está muy abierta a eso ”, aseveró Milley sobre el cambio propuesto a principios de este mes.
La nueva postura de Milley
La nueva postura de Milley, así como el apoyo adicional de las cámaras, se produce después que se estableció -por el Secretario de Defensa- un panel independiente en el Pentágono.
Lloyd Austin a principios de este año, recomendó que los fiscales militares independientes, y no los oficiales al mando, decidieran sobre los casos de agresión sexual.
Austin, quien se ha comprometido a priorizar la lucha contra la agresión sexual y el acoso en los servicios, hasta ahora se ha mantenido callado sobre si finalmente implementará tales cambios.
Sostiene que está revisando las recomendaciones y está esperando aportes de los principales líderes militares, pero dijo que tiene la mente abierta al respecto.
Gillibrand rechaza las críticas
Gillibrand rechazó el viernes las críticas de que su proyecto de ley, si se convierte en ley, socavaría la disciplina en los servicios militares.
Habrá que esperar esta semana para conocer cuáles serán las decisiones finales.