En la medida que el volcán La Soufriere en la isla caribeña de San Vicente registra continuas y más potentes erupciones, sus habitantes huyen a toda prisa. La actividad volcánica genera sacudones y cubre sus adyacencias con ceniza y rocas.
El Político
Quienes en principio no atendieron el alerta oficial para para abandonar el área más cercana al volcán, esta vez se vieron obligados a huir. Este viernes ocurrió la erupción más violenta desde 1979 y el magma alcanzó su máximo nivel. Conforme a la agencia de noticias AP y el lugar informativo digital Metro, un fuerte olor a azufre invadió aldeas y campos y ocultó la luz solar. Toso es gris ceniciento en la isla cuya economía se sustente mayormente del turismo.
Los geólogos coinciden en avisar que las explosiones podrían ser altamente destructivas y que lo peor está por venir. Entre ellos Richard Robertson, del Centro de Investigación Sísmica de la Universidad de las Indias Occidentales, estima que el primer estallido no es necesariamente el mayor que dará este volcán.
Cerca de 16 mil personas debieron abandonar sus hogares con pocos enseres y alojarse en sitios seguros. Oficialmente no se han reportado fallecidos ni personas heridas.
Caribbean seismic expert Prof. Ritchie Robertson urges Vincentians to consult Volcanic Health Hazards Network https://t.co/oE26SQHsPB on how to guard against health impacts of the ash falling across the island. More updates from @NEMOSVG and local radio #Svgeruption2021 pic.twitter.com/b1hEeJzL1P
— UNDRR (@UNDRR) April 9, 2021
Autoridades de San Vicente llaman a mantener la calma
Ralph Gonsalves, el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, declaró a la emisora local NBC Radio que la población debe mantener la calma, ser paciente y tratar de protegerse de la pandemia. Añadió que las autoridades buscan determinar cuál es la mejor forma de recoger y deshacerse de la ceniza. La misma cual cubrió la pista de un aeropuerto cercano a la capital Kingstown, ubicada a unos 32 kilómetros (20 millas) al sur, Y que además se extendió hasta Barbados, aproximadamente a 190 kilómetros (120 millas) al este.
Comentó: “La agricultura se verá muy afectada, Podríamos perder a algunos animales y tendremos que hacer reparaciones en las viviendas. Pero si tenemos vida y tenemos fuerza, podremos reconstruirlo mejor, más fuertes y juntos”.
Gonsalves señaló que una vez calculados los daños, el regreso a la normalidad podría llevarse hasta cuatro meses. Hasta el viernes cerca de 2 mil personas permanecían en 62 albergues equipados por las autoridades. En apoyo, cuatro cruceros vacíos permanecen fondeados en las adyacencias con los cuales se harán los traslados de los damnificados a islas cercanas.
Thank you for your call my brother @MarkJGolding and the expressions of solidarity with us, during these extremely difficult times. We appreciate the support we continue to receive from our brothers and sisters in the region. https://t.co/Q5FJyznCio
— Ralph Gonsalves (@ComradeRalph) April 9, 2021