China podría ser uno de los patrocinantes del conflicto armado que se desarrolla en el estado Apure de Venezuela, fronterizo con Colombia; de acuerdo con recientes revelaciones de Freedom House. En esa zona se llevan a cabo enfrentamientos entre grupos irregulares desde el pasado 21 de marzo.
El Político
La información se dio a conocer en el evento Relaciones chino venezolanas y sus implicaciones para América Latina y el Caribe, reseñado por Primer Informe. En esa actividad develaron algunos datos importantes sobre la relación que mantienen China y Venezuela en los últimos años y la relación con el conflicto armado.
“Venezuela es actualmente el país del hemisferio occidental con mayor inversión china”, con “68 mil millones de dólares en préstamos desde 2007 y la firma de casi 490 acuerdos en diversas áreas”, señaló Gerardo Berthin, director de Programas para América Latina y el Caribe de Freedom House, citado por Primer Informe.
De acuerdo con Berthin, en la relación de China y Venezuela destaca el desconocimiento de las condiciones de 65% de los contratos; del 22% solo hay información parcial y apenas el 12% es de conocimiento público.
Intereses en la explotación minera
En investigaciones realizadas por la Fundación Andrés Bello, respaldadas por Freedom House, se revisaron las relaciones bilaterales entre ambos países. Entre ellas destacan los intereses en la explotación minera, que si bien no es la única área de inversión que mantienen, es la tabla de salvación del régimen para obtener liquidez, evadir las sanciones y garantizar su supervivencia.
Según el experto, “las ganancias de estos intercambios van a las arcas del régimen. Dándoles el dinero necesario para poder eludir la presión financiera internacional por las sanciones”.
Con relación a las empresas Chinas, Betancourt indicó que en las investigaciones confirmaron que son registradas con otros nombres. Asimismo, grupos irregulares son los encargados del traslado y custodia a través de la frontera con Colombia .
En otras palabras, en las zonas mineras se mantiene una relación de cooperación entre los grupos irregulares y las empresas chinas, dijo.
¿Cuáles grupos participan?
De acuerdo con Martha Ardila, también integrante del panel de expertos, no se trata solo de las Farc. Además del ELN, otros grupos irregulares participan y operan libremente en territorio venezolano y son responsables del conflicto guerrillero en Venezuela.
“En particular, en la frontera Arauca-Apure, son bien conocidas las explotaciones ilegales que tienen que ver con el oro… Hay vínculos entre esta situación fronteriza, el conflicto interno, los grupos al margen de la ley y el narcotráfico”, apunta Ardila.
Los participantes del evento Relaciones chino venezolanas y sus implicaciones para América Latina y el Caribe consideran que China es uno de los patrocinantes del conflicto armado por esta razón. Aseguran que las Farc y el ELN participan en ese traslado de minerales que China explota en Venezuela.
El papel de los militares venezolanos
El director de la Fundación Andrés Bello, Parsifal D’Sola, afirmó que en muchos casos los dueños de estas empreas son militares o exmilitares venezolanos que funcionan de fachada para una operación nacional de la que es difícil conocer el impacto.
Tampoco quita atención a la presencia de empresas turcas, iraníes y rusas en la zona. Recordó que cuando Maduro creó el Arco Minero, también creó una “Zona Económica Militar” para proteger sus negocios, en la que da derecho a sus fuerzas armadas a participar en todas las actividades mineras, incluso en aquellas actividades no tan lícitas.
“Esto es posible gracias a la zona especial, que se crea para dar anonimato a las empresas chinas”, indicó Parsifal D’Sola.
El régimen además está más blindado con la Ley Antibloqueo que aprobaron en octubre del 2020. Este instrumento le otorga el carácter de “reservado, confidencial o de divulgación limitada” a cualquier “expediente, documento, información, hecho o circunstancia” que Maduro considere oportuno.
Con estas acciones prohibieron todo el acceso a documentos calificados de confidencial o reservados. Cualquier periodista que se acerque a ellos es retenido e incluso asesinado, según el periodista venezolano Jesús Hermoso.
D’Sola concluye que “el caso China-Venezuela es el ejemplo de cómo no se debe tratar con China. Es un caso que debe ser estudiado y tomado como punto de referencia” para que no se repitan los mismos errores.