El Ejército turco ha matado a 13 guerrilleros del PKK en una operación en el sureste del país, mientras que 14 militares han muerto en distintos enfrentamientos y ataques, informó el diario Hürriyet.
Una operación contra el grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) comenzó hace tres días en los montes Tendurek, situados en la provincia suroriental de Van, limítrofe con Irán.
El Gobernador de esa provincia, Ibrahim Tasyapan, informó hoy de que ocho militares fallecieron en el operativo, entre los que hay un teniente y cinco sargentos, mientras que los milicianos del PKK muertos fueron 13.
Hasta ahora las autoridades habían informado de cuatro militares muertos y un número indeterminado de miembros del PKK abatidos en ese operativo.
La prensa turca informa también de un ataque atribuido al PKK anoche contra un puesto de control del Ejército en la localidad de Dargecit, en la también suroriental provincia de Mardin, en el que han muerto dos soldados y un miembro de un cuerpo paramilitar kurdo leal al Gobierno.
El Estado Mayor del Ejército turco ya informó ayer de otra operación en la provincia suroriental de Hakkari, fronteriza con Irak e Irán, en la que aseguraron haber matado a 33 miembros del PKK y haber detenido a otros 30 que resultaron heridos.
Cazas de combate turcos atacaron dos posiciones del PKK después de haber recibido información de inteligencia y lanzaron una operación terrestre tras los bombardeos, según el diario Sabah.
En esa operación un soldado murió ayer y otros siete resultaron heridos.
La agencia estatal de noticias Anadolu señala hoy que otros tres militares murieron en la provincia de Hakkari, en la misma zona montañosa en la que se atacaron ayer las posiciones del PKK.
En ese enfrentamiento cerca de la frontera con Irak otros 20 uniformados resultaron heridos, tres de ellos de gravedad.
De esta forma, en las últimas 72 horas el número de supuestos militantes del PKK muertos en Turquía asciende a 46, mientras que al menos 15 miembros de las fuerzas de seguridad habrían fallecido en enfrentamientos y ataques en el sureste.
Las fuerzas de seguridad turcas sufren ataques casi diarios del PKK tras el fin de un alto el fuego unilateral por el fracaso de las conversaciones de paz con el Gobierno, en julio de 2015.
Más de 600 policías y soldados han muerto en atentados desde entonces, según datos oficiales.
El PKK, clasificado como terrorista por Turquía, la Unión Europea y Estados Unidos, emprendió en 1984 una lucha armada contra el Estado en demanda de más autonomía para los más de 12 millones de kurdos que viven en el país.
EFE