La agencia de contraespionaje de la República Checa (BIS) denunció que los servicios de inteligencia de Rusia y China han aumentado su actividad para influir sobre la opinión pública y ampliar su influencia en el país centroeuropeo.
En su memoria del año 2015, la BIS destaca la actividad de los agentes rusos para "debilitar la capacidad informativa del país", sobre todo en relación con la anexión de Crimea y el conflicto en el este de Ucrania.
Se trata de "dañar la buena fama de Ucrania y lograr su aislamiento internacional", fomentando incluso la entrada de ciudadanos checos en organizaciones prorrusas en ese país, según la agencia.
LEA TAMBIÉN: Presidente de Gabón no admite protestas por su reelección
Rusia está realizando una "guerra mediática" mediante la "infiltración secreta de medios de comunicación checos e Internet", refleja el informe de contraespionaje, que no da ejemplos por tratarse de información reservada.
Según la BIS, Moscú pretende "ahogar" a los checos con información y desinformación, así como "relativizar la verdad y objetividad" e "imponer el lema del ‘todos mienten'".
El objetivo final de la inteligencia rusa es, siempre según el contraespionaje checo, alterar la cohesión interna de la OTAN y la Unión Europea (UE).
Con información de EFE
