En la historia política de Estados Unidos sólo se han hablado de cuatro juicios a presidentes, y al parecer Donald Trump será el protagonista de dos. Muchos se pregunta de los futuros escenarios para el actual presidente republicano… ¿Cuál se cumplirá?
El Político
Algo que está claro con este posible segundo juicio a Donald Trump es que está arriesgando el poder ocupar otro cargo público nuevamente. De esa forma podría quedar fuera de una futura postulación a la presidencia de Estados Unidos en el 2024.
Aquí entraría otras interrogantes: ¿Este escenario puede tener otras aristas?, ¿Será el final político para Trump?, ¿Cuál será el futuro del partido Republicano?
Para algunos especialistas, es muy factible que Trump nunca vuelva a ocupar la Casa Blanca, no obstante, creen que el "trumpismo" o su movimiento para ‘hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande’ (MAGA por sus siglas en inglés) no se rendirá, sino que seguirá creciendo.
¿En qué dirección va Donald Trump?
“Hay mucha tensión en el partido (Republicano) en este momento. ¿En qué dirección va?" se preguntó Matt Terrill, exestratega del Partido Republicano de Firehouse Strategies.
“El presidente Trump ha sido la voz más fuerte del partido durante los últimos cuatro años. ¿Será ese el caso durante los próximos cuatro años?", inquirió Terrill.
La realidad es que con Trump puede haber diversos escenarios para analizar. En los últimos días, varios influyentes republicanos se han separado del actual presidente republicano. Algunos incluso han abandonado el partido por su adhesión como un culto a Trump y sus actos supuestamente inconstitucionales y posiblemente criminales, indicó Univisión.
“Si estas elecciones fueran anuladas por meras acusaciones del lado perdedor, nuestra democracia entraría en una espiral de muerte. Nunca volveríamos a ver a toda la nación aceptar las elecciones ”, expresó McConnell al Senado.
¿Cuáles son los obstáculos de Trump?
Trump tiene varios obstáculos que sortear. En sus discursos, tanto Trump como sus principales partidarios se han vuelto contra los republicanos que alguna vez fueron leales. Entre los que cayeron en desgracia está el ex fiscal general William Barr y el gobernador de Georgia, Brian Kemp.
Otros obstáculos que tiene el actual inquilino de la Casa Blanca es que fue bloqueado en las redes sociales. Adicionalmente, su Organización Trump perdió una serie de contratos, incluido el campeonato de golf de la PGA en una de sus instalaciones.
Hasta sus familiares han sufrido el acoso como resultado de sus acciones. Por ese motivo, un banco expulsó a su hija Ivanka Trump de su directorio.
Otros bancos y grandes corporaciones anunciaron que no darán más donaciones a los republicanos que votaron para desafiar los resultados de las elecciones del 3 de noviembre.
Además, es factible que le espere una avalancha de demandas después que deje de ser presidente de los EE.UU. Y encima, no puede reclamar ya inmunidad presidencial ante un posible juicio.
¿Creará su propio partido?
A pesar del gran rechazo que experimenta en estos momentos, Trump y su familia siguen desafiantes. Presume tener un gran apoyo de sus seguidores, tan fuerte que el Partido Republicano ahora le pertenece.
“Este ya no es el Partido Republicano. Este es el Partido Republicano de Donald Trump", afirmó su hijo, Donald Trump Jr., a la multitud el 6 de enero antes de que marchara hacia el Capitolio.
"El movimiento MAGA no va (…) a ninguna parte", destacó su otro hijo, Eric Trump, quien consideró que su padre "creó el mayor movimiento político en la historia de Estados Unidos".
Su destino es incierto en el Senado
La segunda votación para llevar a Trump a un juicio político arrojó 232 contra 197, dos votos más "sí" que en su primera votación de ‘impeachment’ en diciembre de 2019.
Pero, esta vez fue mucho más bipartidista. 10 republicanos se distanciaron del primer mandatario, incluida la representante Liz Cheney de Wyoming, la tercera republicana de rango en la Cámara Baja e hija del exvicepresidente.
No obstante, antes de la votación, algunos analistas pronosticaron que hasta 24 republicanos votarían contra Trump. Esto no fue así. La realidad es que su destino es incierto en el Senado, donde los parlamentarios son más independientes y la indignación será la que decida.
Para ser condenado en el Senado se necesita una mayoría de dos tercios o 67 senadores si los 100 miembros están presentes. Si los 50 demócratas votan por condenar, se requerirían 17 republicanos más.
El legado de Trump
Para algunos expertos el juicio político puede haber dañado el legado de Trump y su elegibilidad, pero su base en el partido sigue siendo muy leal. Adicionalmente, a pesar de que a algunos líderes republicanos puede que no les guste Trump, el juicio político pueda convertirlo en un mártir con la base y fortalecerlo.
Otros ven con recelo que la unión de milicias de derecha, supremacistas blancos y seguidores de las teorías de conspiración de QAnon no desaparezca, sino que vuelva a atacar.
Este escenario plantea que el partido republicano puede tener influyentes exponentes de la extrema derecha. Si es así, es factible que Trump sea una fuerza en el partido para las futuras elecciones de 2022 y 2024.
De hecho, dos tercios de los republicanos de la Cámara Baja votaron para anular la certificación de los resultados de las elecciones en las horas posteriores a la insurrección y el 93% de los republicanos de la Cámara votaron en contra del juicio político.
Hablan las encuestas
En una encuesta de Axios-Ipsos, el 64% de los republicanos indicó que apoyan el comportamiento reciente de Trump y el 57% de los republicanos aseveró que Trump debería ser su candidato para 2024. Solo el 17% piensa que debería ser destituido.
En esa misma encuesta, arrojó que la mayoría de los republicanos (56%) se consideran republicanos tradicionales, mientras que 36% se llaman a sí mismos republicanos alineados con Trump. Entre los que se identifican como republicanos tradicionales, el 24% afirma que Trump debe ser destituido. Solo el 1% de los partidarios de Trump apoya esa premisa, y el 94% rechaza la expulsión.
Esos números presentan un camino complicado para el Partido Republicano, pero todavía falta conocer que pasará la próxima semana cuando se introduzca la solicitud del segundo "impeachment" para Trump