Las naciones más ricas del mundo acordaron renovar una iniciativa de alivio de la deuda para los países más pobres hasta al menos la primera mitad de 2021.
El Político
Aunque quedándose cortas ante un llamado del Banco Mundial sobre una extensión de un año completo debido a la pandemia.
En un comunicado emitido por Arabia Saudita, que ocupa la presidencia del bloque, el G20 adelantó que podría emitir otra prórroga de seis meses el próximo año.
El comunicado indicó que los miembros del G20 estaban decepcionados por la falta de progreso en la extensión del plan de alivio de la deuda para involucrar a acreedores privados, reportó El País.
Banco Mundial
El presidente del Banco Mundial, David Malpass, hizo un llamado para que se tomen más medidas hacia una reducción significativa de la deuda. “Es urgente progresar rápidamente en un marco porque el riesgo de incumplimientos desordenados está aumentando”, dijo.
Las consecuencias para algunas naciones son nefastas.
Países africanos enfrentan una brecha de financiamiento de 345 mil millones de dólares hasta 2023, subrayó el Fondo Monetario Internacional (FMI) la semana pasada, y algunos se vieron obligados a elegir entre el servicio de deuda o un gasto en programas sociales y de salud.
Crédito privado
El grupo de economías industrializadas dio a conocer la iniciativa de suspensión del servicio de la deuda en abril para proporcionar miles de millones de dólares en alivio a 73 países elegibles.
Hasta ahora, más de 40 han solicitado la ayuda que estaba programada para llegar a diciembre, la mayoría en África subsahariana.
El Banco Mundial estima que los países podrían ahorrar 12 mil millones de dólares adeudados a acreedores gubernamentales este año.
Los países elegibles también pueden pedir a los acreedores privados que congelen los reembolsos, pero solo unos pocos lo han hecho, una falla importante según grupos de defensa.
Rol de China
Malpass había pedido al G20 que extendiera el alivio de la deuda hasta fines del próximo año y dijo que los fondos de cobertura y China deberían participar más.
A China se le debe casi 60 por ciento de la deuda bilateral que las naciones más pobres del mundo deberían pagar este año.
El presidente del Banco Mundial ganó el apoyo del ministro de Finanzas alemán, Olaf Scholz, quien este miércoles pidió un acuerdo que incluya a “muchos otros países que no están participando en la suspensión de la deuda ahora”. China tiene que formar “parte de la solución”, enfatizó.
Grupos de defensa como la Red Europea de Deuda y Desarrollo dicen que la ayuda gubernamental por sí sola es insuficiente.