En primer lugar se encuentra Alonso Alvaro, de procedencia italiana, quien era cabecilla de la Ndrangheta, una de las mafias italianas más poderosas y violentas de Europa, con operaciones de narcotráfico en España, Francia, Malta, Bélgica, Alemania, Suiza, Países Bajos, Albania, y Reino Unido, se movía desde el 2017 entre Cúcuta y Bogotá en Colombia.
El Político
En Colombia también se hallaba el ingeniero ruso, Sergey Shuspanov, llevaba varios años trabajando en Colombia en una empresa aeronáutica, pese a que en Rusia tenía un proceso pendiente por recepción y divulgación ilegal de información; específicamente por sustraer y comercializar las patentes de motores para helicópteros Eslavos TV3-117.
Además del español, Carlos García Roldán, catalán de nacimiento, quien llevaba varios meses trabajando en Buga como domiciliario en moto, aunque una circular roja de Interpol advierte que es uno de los estafadores más buscados en el mundo luego de que huyera con $7 millones de euros que invirtieron más de 300 personas en la compra de lujosas viviendas en el balneario de Palmas de Mallorca.
Aunque ninguno de estos delincuentes tiene algún vínculo en común ni relación alguna, tienen en común es que todos han elegido a Colombia como lugar para ocultarse la justicia de sus propios países, reportó Infobae.
En este sentido, también han llegado al país todo tipo de criminales provenientes de otros países: pedófilos, narcos, traficantes de armas, ladrones de arte y comercializadores de metales preciosos, entre otros, han terminado su actividad criminal luego de redadas de las autoridades en distintos departamentos de Colombia.
¿Por qué Colombia es tan atractivo?
De acuerdo con el coronel (r) y experto en seguridad John Marulanda, citado por el diario El País de Cali, son tres las características que hacen a Colombia un país atractivo para estos delincuentes.
Primero, la falta de vigilancia en las fronteras, especialmente la de Venezuela que es muy difícil de controlar.
Segundo, los niveles de corrupción tan altos y que permiten que fácilmente un extranjero obtenga documentos certificando su ciudadanía.
Y tercero, la impunidad porque la justicia no funciona como debería ser y ellos aquí pueden comprar cualquier cosa y es difícil que la justicia los emproblematice (sic)", explica Marulanda.
¿Cómo entran?
Los delincuentes aprovechan las fronteras porosas y los miles de kilómetros fronterizos con Panamá, Venezuela, Ecuador, Perú y Brasil que hacen casi imposible mantener el control sobre estos pasos limítrofes.
Un oficial de Inteligencia de la Policía, citado por el medio vallecaucano, explica que muchos de los capturados en Colombia ingresan legalmente y antes de que se emita circular roja en su nombre y aquí se quedan. Otros lo hacen a través de las fronteras terrestres con documentación ilegal.
“Muchos de estos fugitivos no se esconden entre la gente sino que se involucran con organizaciones ilegales que de alguna forma les ayuda a ocultar su identidad y permanecer distantes de las autoridades; muchos en zonas rurales apartadas”, señaló el oficial.
“Hay que sumar que la frontera con Panamá, por el Urabá, es la vena abierta más grande de migración legal que hay en toda América Latina. Por ahí pasan cantidades de personas de Pakistán, de África, de Oriente Medio, de Cuba y todos los rincones del mundo con rumbo a Centroamérica y con destino final los Estados Unidos y Canadá”, agrega Marulanda.
Facilidades para quedarse
Además de la facilidad de ingreso mediante los pasos fronterizos, también los atraen las facilidades para quedarse en el país. Pues es un lugar seguro y donde pueden obtener una nueva identidad y nacionalidad.
Así se corroboró a finales de enero de este año, cuando fueron detenidos en Estados Unidos tres ciudadanos sirios, señalados de integrar la red Al Qaeda, portando pasaportes que los identificaba como colombianos.
De hecho, según la documentación que les fue retenida en el aeropuerto de Dallas, los supuestos ciudadanos colombianos, Tuameh Tuameh, Al Raefee y Al Harari Al Harari, nacieron en Cartagena y radicaron sus pasaportes en La Guajira.