El mundo entero espera por las vacunas que desarrollan diferentes laboratorios contra el COVID-19 para poder volver a la normalidad que la humanidad entera anhela.
El Político
Ante escenario un poco desconocido aún el principal médico del país dice que Estados Unidos no tiene que esperar una vacuna para controlar el coronavirus.
«Podemos hacerlo ahora mismo», dijo el Dr. Jerome Adams, director general de Sanidad. «Las herramientas para detener este virus ya están en nuestras comunidades».
Se ha hecho antes, en lugares como Nueva York, dijo Adams a CNN.
Nueva York fue el estado más afectado por el virus a principios de la primavera. El estado implementó una de las primeras órdenes de confinamiento en Estados Unidos y reabrió las regiones solo cuando cumplieron con varios requisitos de salud. En las últimas semanas, Nueva York ha mantenido una tasa de infección inferior al 1%.
«Nuestras cifras continúan reflejando el trabajo de los neoyorquinos, quienes finalmente aplanaron la curva», dijo el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, a principios de esta semana. «A medida que nos acercamos al otoño y la temporada de influenza, necesitamos que todos sigan usando mascarillas, se distancien físicamente y se laven las manos».
Controlar el coronavirus sin la vacuna
Puede parecer una solución simple a un problema complejo, pero los funcionarios de salud de todo el país han dicho que el cumplimiento generalizado de las medidas de seguridad, como el uso generalizado de mascarillas, podría ser casi tan poderoso como otro confinamiento.
Y los investigadores del proyecto del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington dicen que podrían salvarse más de 115.000 vidas, en enero, si el 95% de los estadounidenses usaran mascarillas.
Estas medidas, si se implementan, también podrían significar una temporada de influenza más leve este año, según un nuevo estudio.
«Si continúan las amplias medidas de mitigación en la comunidad durante el otoño, la actividad de la influenza en Estados Unidos podría permanecer baja y la temporada podría reducirse o retrasarse», dice un estudio publicado, el jueves, en la revista Morbidity and Mortality Weekly, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).
Más de 2.000 muertos
Hasta ahora, más de 6,6 millones se han infectado por covid-19 en Estados Unidos desde el comienzo de la pandemia.
Y al menos 197.633 personas han muerto, según la Universidad Johns Hopkins. Y un pronóstico conjunto, publicado el jueves por los CDC, proyecta que más de 20.000 estadounidenses podrían morir en las próximas tres semanas a causa del covid-19.
Pero no está claro qué ocurrirá después en la pandemia.