Destinará unos 888 millones de dólares para la construcción de puestos de control y contratación de personal. La inversión inicial afecta a Gales, Inglaterra y Escocia.
El Político
Reino Unido dejará definitivamente de formar parte de la Unión Europea (UE) dentro de seis meses, cuando acabe el período de transición del Brexit. Ante la inminente salida, el gobierno de Boris Johnson ha destinado 705 millones de libras (unos 888 millones de dólares) para la mejora de las instalaciones en las fronteras, lo que incluye la construcción de puestos de control y la contratación de medio millar de personas.
«Ya sea que logremos o no un acuerdo comercial al estilo del de Canadá con la UE durante las negociaciones que estamos llevando a cabo, estaremos fuera del mercado único y de la unión aduanera, pase lo que pase», aseguró Michael Gove, secretario del gabinete y quien está a cargo de los preparativos. «El gobierno necesita tomar algunas medidas para asegurarse de que estamos listos», señaló.
El paquete de 705 millones de libras incluye 235 millones para personal y sistemas de tecnología, y 470 millones para el establecimiento de una infraestructura portuaria y terrestre que garantice el cumplimiento de los nuevos procedimientos aduaneros.
Esta inversión es para las fronteras de Gales, Inglaterra y Escocia con la Unión Europea, y se espera que en las próximas semanas se anuncie el plan para Irlanda del Norte, donde, a pesar de que Johnson había dicho que no se impondrían controles, se llevarán a cabo inspecciones «de algunos productos de origen animal», según Gove.
Primer puesto aduanero en 27 años
El plan del gobierno y el relanzamiento de la campaña «Get Ready for Brexit» (Prepárese para el Brexit) está rodeado de polémica. El periódico The Guardian reveló que el gobierno compró en secreto 11 hectáreas de tierra a 32 kilómetros de Dover, a las afueras de Ashford, para ubicar un enorme centro para los 10.000 camiones que pasan diariamente por el puerto de Kent desde Calais, en lo que será el primer puesto aduanero británico en 27 años dedicado a controlar los productos procedentes de la UE.
Preguntado al respecto, Gove explicó que la intención del Ejecutivo es «asegurarnos de que la carga que viaja a través de Kent pueda llegar a Dover, a los contenedores y luego a Francia lo más rápido posible. Puede darse el caso de que, no tanto en Kent como en otros lugares, haya infraestructura específica para suavizar el flujo del tráfico».
Damian Green, diputado del parlamento de la ciudad, es una de las voces más críticas con el gobierno de su partido por no haber consultado a la población antes de poner en marcha este plan secreto.
«Me opongo firmemente a esto», dijo Green a la cadena Sky News, ya que «están planeando usarlo como estación de espera para camiones si los puertos del Canal están bloqueados después de que finalice el período de transición en diciembre, lo cual sería enormemente perjudicial para todos en el área, ya que está demasiado cerca de muchas viviendas».
La millonaria inversión fue dada a conocer después de que se filtrara una carta de la secretaria de Comercio Internacional, Liz Truss, al ministro de Finanzas, Rishi Sunak, en la que muestra su preocupación sobre el caos que se avecina debido a la falta de planificación:
«Necesitamos garantías de que podemos tener el control total en los puertos en julio del 2021», escribió, y advirtió: «Si fracasamos en tener a tiempo el nuevo sistema digitalizado de aranceles para Irlanda del Norte, haremos frente a riesgos políticos, legales y de reputación».
(Con información de ABC)