El líder opositor Juan Guaidó anunció el miércoles que se prepara para emprender una nueva escalada de presiones contra el mandatario Nicolás Maduro.
El Político
Anticipó nuevas sanciones internacionales a los que calificó como “criminales y todos los que respaldan la dictadura” e indicó que la oposición convocará próximamente a más acciones en las calles para elevar las presiones internas contra Maduro y retomar el control del Palacio Legislativo, que perdió en enero cuando las fuerzas de seguridad les bloquearon el paso y se instaló una directiva paralela.
Durante 2019 la oposición recurrió a las sanciones económicas de Estados Unidos y movilizaciones callejeras para forzar el derrocamiento del mandatario izquierdista quien, empero, logró superar la situación gracias en parte al respaldo del alto mando militar y el apoyo de los gobiernos de Rusia, China, Turquía y Cuba.
Desde una plaza de la barriada capitalina de Chacao, donde la mayoría opositora de la Asamblea Nacional realizó el miércoles su sesión semanal, Guaidó condenó la detención y desaparición de su tío Juan José Márquez, quien lo acompañó en el vuelo comercial que tomó desde Lisboa para retornar al país y dijo a la prensa que “las amenazas no nos han detenido ni nos van a detener”.
“Te hago responsable, usurpador Nicolás Maduro, y a cada uno de tus esbirros en Maiquetía de lo que le pase a Juan José Márquez, un hombre honesto y valiente que conoce como nadie el valor de esta lucha y su único problema es preocuparse por su familia”, afirmó Guaidó en su cuenta de Twitter al cumplirse 24 horas de la desaparición de su familiar.
Márquez fue retenido la tarde del martes poco después de pasar los controles de migración del aeropuerto internacional para una supuesta inspección de las autoridades tributarias.
“No sabemos su paradero, no sabemos qué instituto lo tiene, no sabemos qué organismo lo detuvo”, expresó Romina Botaro, esposa de Márquez.
El subsecretario interino para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Michael Kozak, exigió la liberación inmediata del tío de Guaidó y dijo en Twitter que esa acción demuestra que “la dictadura está débil y desesperada”.
Como parte del proceso de renovación de su gestión como presidente interino de Venezuela, Guaidó anunció el nombramiento de Juan Pablo Soteldo como Contralor Especial y la creación del Consejo Contralor para fortalecer la transparencia de su gobierno, la protección de activos públicos y la presión a lo que identificó como los “criminales financieros de la dictadura”.
Guaidó regresó la víspera al país tras una gira que incluyó una reunión con Donald Trump.
El opositor logró pasar los controles de inmigración del principal aeropuerto del país, a las afueras de Caracas. No fue detenido pese a que salió del país desafiando la prohibición de viajar impuesta por el gobierno de Maduro.
Guaidó inició su viaje con el objetivo de aumentar el respaldo de Washington y Europa a los esfuerzos de la oposición para sacar a Maduro del poder.
Por su parte, Maduro apareció en la televisora estatal el martes para hablar sobre transporte público, anunciando nuevos autobuses y la ampliación de sus rutas. El dirigente no mencionó directamente la vuelta de Guaidó al país.
Como presidente de la Asamblea Nacional, Guaidó saltó al primer plano del panorama político al reclamar la presidencia del país alegando que el gobierno de Maduro era ilegítimo tras una reelección fraudulenta en 2018. Obtuvo el respaldo de Estados Unidos y de más de 50 naciones más, aunque por el momento no parece haber socavado el poder de Maduro.
Fuente: AP