El secretario general de la OEA, Luis Almagro, emitió una carta al líder opositor venezolano y preso político, Leopoldo López, en donde cuestionó el sistema democrático que se instauró en Venezuela, así como también aplaudió la postura de algunos países de no otorgar la presidencia pro témpore del Mercosur al país caribeño.
Maryann H. León / El Político
En la carta que fue reseñada por todos los medios de comunicación social de latinoamérica, Almagro apoyó la decisión de Argentina, Paraguay y Brasil de no reconocer la presidencia pro témpore del Mercosur por parte de Venezuela.
Muy indirectamente cuestionó la postura del gobierno uruguayo, representado por Tabaré Vázquez y su canciller Nin Novoa, por intentar pasarle el mando al país caribeño.
"Hoy en Venezuela no hay democracia ni Estado de derecho", escribió Almagro. "La existencia de presos políticos", a quienes "tortura", según el funcionario, "es absolutamente incompatible con un sistema democrático", reafirmó, por lo que reiteró su postura que Venezuela no puede presidir el Mercado Común del Sur.
Como se recordará existe una crisis en el Mercosur por la presidencia del organismo, la cual debería ser dirigida por parte de Venezuela, pero en virtud de la crisis política, económica y social que enfrenta el país suramericano algunos miembros del Mercosur, como Argentina, Brasil y Paraguay, se han opuesto a dicha presidencia.
El presidente de Uruguay, mediante el canciller Novoa, ha dicho que respetará los estatutos del Mercosur, lo que ha sido cuestionado por el resto de los miembros del Mercosur como una postura complaciente con Venezuela.
Vázquez dijo además que no se opondría al traspaso de la presidencia pro témpore del bloque integrado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela.
Conflictos internos
Ante esta postura, el canciller brasileño José Serra, visitó Paraguay a fin de tratar el tema, encuentro que causó problemas internos entre Brasil y Uruguay.
“No nos gustó mucho que el canciller José Serra viniera a Uruguay a decirnos que venían con la pretensión de que se suspendiera el traspaso y que, además, si se suspendía nos iban a llevar en sus negociaciones con otros países, como queriendo comprar el voto de Uruguay”, dijo Nin Novoa ante la comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara baja.
Ante estas declaraciones, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil indicaron a EFE que el embajador fue convocado por la Cancillería, aunque no precisaron el motivo. Sin embargo algunos medios de comunicación locales señalan que la razón de la llamada son las declaraciones realizadas por Novoa, quien al parecer insinuó que Brasil quiso “comprar el voto de Uruguay” en el embrollo sobre el traspaso de la presidencia del Mercosur a Venezuela.
A pesar que el Presidente Uruguayo ya mostró su posición, el canciller de esa nación argumentó las posturas contrarias al traspaso de la presidencia del bloque de ciertos “socios mercosurianos”, en particular Brasil y Paraguay, “saltean lo jurídico” y hacen primar motivos “eminentemente políticos”.
“Aduciendo razones que no están aquí (en los reglamentos del Mercosur), quieren eludir, erosionar, hacer ‘bullying’ a la presidencia de Venezuela. Esa es la pura verdad”, sentenció Nin Novoa.
Venezuela
Por su parte, el diputado a la Asamblea Nacional, Williams Dávila, dijo que es falso que el país haya abrogado para tomar la presidencia del Mercosur y en cambio ve viable, que la Triple Alianza (Paraguay, Brasil y Argentina), se siente a dialogar con el Ejecutivo nacional en “aras de proteger y fortalecer el Mercosur”.
“Desde el Parlasur propusimos se gestionaran buenos oficios, a nivel de la directiva, para buscarle una solución política, allí tienen que sentarse los cuatro jefes de Estado, para proteger y fortalecer el Mercosur y de las ventajas económicas y sociales que eso trae para nuestro pueblo”, sostuvo.