Este viernes el estallido social en Chile mostró quienes eran con una masiva marcha hacia el centro de Santiago, solicitando la renuncia del primer mandatario, Sebastián Piñera, quien ha tratado de mitigar la terrible situación que azota su país sin éxito.
El Político
La marcha del pasado viernes se concentró en la Plaza Italia, ubicada en Santiago de Chile, a pesar de que había mucha gente alegre, volvieron a ocurrir los actos de vandalismo cuando saquearon e incendiaron un edificio patrimonial, aseveró telemundo51.com.
Con esta marcha volvió la protesta ciudadana, que desde el 18 de octubre está en las calles exigiendo cambios contundentes y profundos en las áreas de salud, educación y pensiones, y que creen que el actual presidente de Chile no es capaz de lograrlo.
Además de concentrarse los ciudadanos en Santiago de Chile, también lo hicieron en Viña del Mar y Valparaíso (centro), de hecho ambas marchas fueron muy concurridas, asimismo los chilenos también participaron en Coquimbo y La Serena (norte) y en Concepción (sur).
Quienes protestas demandan políticas más incluyentes en los sectores de salud, educación y pensiones, exigen la renuncia del presidente, convocar un plebiscito y comenzar un proceso constituyente.
Las medidas de Sebastián Piñera
Debido a los terribles actos vandálicos que destruyeron gran parte de las estaciones de metro de Santiago, los saqueos y quemas simultáneas de supermercados, farmacias y distintos espacios públicos,el desbastamiento de zonas periféricas pobres, Sebastián Piñera le pidió perdón a sus compatriotas y les dijo que haría reformas para evitar la desigualdad social.
Y de hecho lo hizo, dio a conocer una serie de reformas sociales, que los ciudadanos consideraron insuficiente.
Además reforzó la seguridad con la finalidad de restablecer el orden público, que es afectado diariamente por actos vandálicos, y que han ocasionado la muerte de unas 20 personas.
Adicionalmente, los ciudadanos que protestan los reprimen tanto por la policía como por el ejército, quienes fueron los responsables de la seguridad cuando empezaron las protestas sociales.
Incluso el presidente recibió a una misión de la ONU para analizar la presunta comisión de violaciones de derechos humanos por parte de estos agentes del Estado. Pero nadie se encargó de evaluar los grandes daños al patrimonio chileno que ocasionaron los vándalos que saquearon y quemaron diversas instituciones e incluso una universidad y una iglesia.
Manifestaciones
El viernes pasado fue convocada una nueva marcha y concentración, por las redes sociales escribían, "La tercera será la vencida", además publicaban llamados a concentrase en Santiago de Chile en lo que denominaron la "Marcha más grande de Chile 3″, la finalidad era que se replicaran las multitudinarias manifestaciones que realizan los chilenos todos los viernes desde el 25 de octubre.
El viernes 8 de noviembre, el número de personas que participó en la concentración -según los datos oficiales- fue de 75.000 manifestantes quienes protestaron de forma pacífica con cánticos, cacerolas y pancartas, pero esta participación se desvirtuó por los por los desafueros que unos desadaptados realizaban en una esquina de la Plaza Italia.
Luego a pocos metro de la concentración pacífica, los vándalos quemaban un edificio patrimonial de la Universidad Pedro de Valdivia, primero lo saquearon y después lo incendiaron, así lo describió, Felipe Guevara, el intendente de la región Metropolitana.
En intendente también informó que algunos manifestantes fueron a diferentes áreas de la ciudad para seguir destruyendo lo que encontraran a su paso, como ocurrió con el Registro Civil del barrio santiaguino de Providencia, el cual fue incendiado.
Guevara le pidió a las personas pacífica que "aislaran a estos delincuentes" y "retirarse del lugar" cuando una persona "comienza a tener actos no deseados".
Denuncias
Hasta los momentos la agenda social planteada por Piñera no ha satisfecho a los manifestantes, además el sigue queriendo mantener el orden público, motivo por el cual el pasado jueves convocó al Consejo de Seguridad Nacional -institución que incluye a las autoridades del Estado y a los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas- para evitar que sigan saqueando e incendiado la ciudad.
Además, siguen las denuncias sobre la violación de derechos fundamentales, por ende el Instituto Nacional de Derechos Humanos de Chile introdujo 262 acciones judiciales, 5 por homicidio, 6 por homicidio frustrado, 52 por violencia sexual y 171 por torturas y tratos crueles.
Por su parte, la Fiscalía de Chile dio a conocer que tiene abierta 1.089 investigaciones penales a nivel nacional por denuncias de violencia institucional desde que inició el estallido social.