Este viernes 9 de agosto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó que ha mantenido conversaciones con la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) a fin de asegurarse que las "opiniones fuertes" de la organización sean consideradas, mientras que el Congreso evalúa crear una ley sobre armas
El Político
Tras los dos tiroteos masivos en Texas y Ohio, el pasado fin de semana, vuelve a debatirse el tema de la tenencia de armas. Trump informó, vía Twitter, que hay serias discusiones entre los líderes de la Cámara de Representantes y el Senado sobre la ampliación de las verificaciones de antecedentes para la venta de armas, luego de los ataques que dejaron 31 personas sin vida.
Pues, la Segunda Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, garantiza el derecho de todos los ciudadanos estadounidenses a poseer y portar armas, entre ellas las de fuego.
El mandatario agregó que "había estado hablando con la NRA y otros, para que sus puntos de vista muy fuertes puedan ser plenamente representados y respetados".
Mientras que la NRA manifestó que se oponía a cualquier otra restricción de armas, mediante un comunicado el jueves 8 de agosto.
Por otra parte, el Senador republicano, Mitch McConnell, rechazó la solicitud de aproximadamente, 200 alcaldes, que piden al Senado regresar temprano del receso para considerar la nueva ley sobre armas.
Trump ha expresado su intención de reforzar las verificaciones de antecedentes para la compra de armas, acompañadas de revisiones o controles mentales que impidan a las personas con trastornos psicológicos acceder al armamento. Así como también pidió el apoyo del Congreso para aplicar ese par de medidas, pero todavía no asoma su voluntad para prohibir la venta de los rifles de asalto.
Fuente: VOA