El Gobierno de Bolivia advirtió hoy de una posible "catástrofe ambiental" en la región fronteriza del Silala si las aguas fósiles que posee se agotan por completo por el uso "abusivo" de las mismas que hacen empresas del norte de Chile.
"Hay todo un ecosistema de plantas, de animales, que vive hace miles de años, y si se seca el agua (del Silala) vamos a tener la primera catástrofe ambiental provocada por un abuso y por un robo de extranjeros a nuestros recursos naturales", dijo en un discurso el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera.
El alto funcionario habló en esos términos durante un encuentro con más de tres mil jóvenes que cumplen un servicio premilitar en la localidad de Quillacollo, en la región central de Cochabamba.
García Linera explicó que estudios certifican una reducción a la mitad del nivel de esas aguas subterráneas entre el 2000 y el 2013.
Por su condición de subterráneas esas aguas no se renuevan con lluvias y corren el riesgo de desaparecer "por el uso arbitrario y abusivo del Gobierno de Chile", insistió.
Si el depósito de agua del Silala se termina, agregó, también se dañará el permafrost, que es una capa de hielo que está bajo de la tierra e impide la salida al exterior de dióxido de carbono.
La Paz defiende que las aguas del Silala son manantiales cuyo flujo fue desviado artificialmente por obras construidas en territorio boliviano por orden de Chile pero sin permiso de Bolivia.
El presidente Evo Morales anunció en marzo pasado que iba a presentar una demanda en la Corte de Justicia de La Haya contra Chile por ese uso que considera abusivo de las aguas del Silala.
Sin embargo, Chile se adelantó e interpuso en junio una demanda en el mismo tribunal argumentando que el Silala es un río de cauce internacional y que, por tanto, tiene derecho a su aprovechamiento.
Bolivia responderá a la demanda y después presentará una contrademanda por la canalización de las aguas y su aprovechamiento sin autorización en el norte de Chile, agregó el vicepresidente.
Con información de Terra