La Fiscalía de Chicago imputó 16 cargos más al agente blanco Jason Van Dyke, que ya había sido acusado de asesinato en primer grado por la muerte a balazos del joven negro Laquan McDonald, un episodio que provocó multitudinarias manifestaciones en Estados Unidos.
A través de su abogado, Van Dyke se declaró hoy no culpable de los nuevos cargos de agresión agravada que se le imputan.
La ampliación de los cargos contra el policía se produce en un momento en el que el juez Vincent Gaughan, del distrito de Cook, en Illinois, está preparando la sentencia contra el veterano agente, que con la nueva acusación de hoy tendrá que defenderse de 23 cargos de la Fiscalía.
El 12 de octubre de 2014, Van Dyke, un veterano agente de la Policía de Chicago, asestó al joven 16 balazos, la mayoría de ellos cuando el joven ya se encontraba inerte en el suelo, según un video que las autoridades de Chicago dieron a conocer tras el suceso y que desató grandes protestas.
Van Dyke, un agente de raza blanca, mantiene que en el momento de los hechos el joven iba armado con un cuchillo y se sintió amenazado, a pesar de que en el video del incidente se aprecia que McDonald se estaba alejando de él cuando recibe el primer tiro.
Después de los disparos se ve a un policía que se acerca al joven tendido y patea un pequeño cuchillo que quedó junto a McDonald.
El policía fue acusado el pasado 24 de noviembre de 2015 de seis cargos de asesinato en primer grado y otro por mal comportamiento en el cumplimiento de sus obligaciones oficiales por la muerte de McDonald, quien al parecer se encontraba robando.
Las protestas por la muerte de McDonald se prolongaron en noviembre de 2015 durante días y, en ellas, los manifestantes llegaron a pedir la dimisión del alcalde demócrata Rahm Emanuel y de la fiscal del estado de Illinois, la latina Anita Álvarez, a quienes acusaron de haber encubierto al policía blanco al impedir durante un año la divulgación del video del incidente.
Este caso de supuesta violencia policial y racismo en EE.UU. se suma a otros ocurridos desde hace más de dos años en otras ciudades y que han generado protestas de la comunidad negra, sobre todo desde la muerte en Ferguson (Misuri) del joven afroamericano Michael Brown a manos de un agente blanco, exonerado de todos los cargos.
Esta muerte y la de otras personas de raza negra por disparos de policías blancos han generado el nacimiento de un nuevo movimiento civil a nivel nacional llamado "Black Lives Matter" ("Las vidas negras importan"), que reclama el fin de la violencia policial contra la comunidad negra.
EFE