China es una de las grandes potencias que ha invertido en países latinoamericanos, siendo su principal beneficiado Venezuela; ahora luego de las fuertes bajas económicas Brasil se suma a los prestatarios y es el segundo deudor del gigante asiático, que se ha convertido en el gran banquero para Latinoamérica.
Redacción El Político
En los últimos dos años Brasil ha recibido de China grandes préstamos que le han servido para afianzar su economía y hacer crecer sus industrias, escalando hasta el puesto número uno de países desarrollados en Latinoamérica y el número dos en cuanto a deudas con China.
Lea también : Incrementa producción industrial en Brasil
A pesar de la fuerte crisis política vivida en Brasil durante 2016, China no demoró los préstamos que solicitó este para el crecimiento de la industria petrolera y sus derivados, canalizados directamente a la empresa PetroBras, la cual es encargada de exportar el crudo a China y la principal responsable de saldar la abultada deuda, según reseñó El País.
Durante 2016 China otorgó a Brasil un total de 15.000 millones de dólares, que sumados a las cifras de años anteriores, arroja números históricos en las líneas de crédito asiáticas, siendo solo superada por las cantidades concedidas en 10 años a su principal aliado Venezuela.
Referente a esto un estudio hecho por bancos brasileros, arrojó que China ha hecho préstamos a Latinoamérica por valor de 21.200 millones de dólares, solo durante 2016, más que los créditos dados por el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo de forma conjunta durante el mismo tiempo.
Lea también : Nuevo canciller de Brasil denunció una “escalada autoritaria” en Venezuela
Dicho estudio explicó también que Brasil en 11 años ha acumulado 36.800 millones de dólares procedentes de China, ubicándose detrás de Venezuela con 62.200 millones, en el tercer puesto se encuentra Ecuador con 17.400 millones y luego Argentina que recientemente ha solicitado una comisión al gigante asiático que aún no ha sido aprobada por diferencias entre las políticas de Macri y la ideología de Xi Jiping.
Todas estas deudas han convertido a China en el gran banquero de Latinoamérica, siendo además el país que más cuentas por cobrar acumula en el mundo.