El 11 de septiembre de 2001 se vivió un atentado que cobró con la vida de 2996 personas y 25 mil heridos, luego de que dos aviones piloteados por terroristas de Al Qaeda impactarán en las Torres Gemelas.
El Político
El grupo terrorista Al Qaeda, bajo el liderazgo de Osama bin Laden, conmocionó al mundo tras secuestrar cuatro aviones comerciales y llevar a cabo una serie de ataques que dejaron una profunda marca en la historia de todos los estadounidenses.
A las 8:46 de la mañana, se reportó el primer incidente, luego de que el vuelo 11 de American Airlines se estrellara contra la torre norte del World Trade Center en la ciudad de Nueva York. Este fue el “timbre de inicio” de lo que sería una tragedia nacional.
9:03am; el vuelo 175 de United Airlines impactó contra la torre sur del World Trade Center. La magnitud de la tragedia aumentaba y era aún mas evidente los daños ocasionados. Ya el pánico se apoderaba de quienes presenciaban los terribles sucesos.
A las 9:37 se reporta el tercer ataque. Es identificado como el vuelo 77 de American Airlines, el cual fue secuestrado por cinco miembros de Al Qaeda y se estrelló contra el Pentágono en Washington D.C. Este ataque costó la vida de las 64 personas que se encontraban abordo del avión y 125 que se encontraban en el departamento atacado.
Por último, secuestraron un cuarto avión, el vuelo 93 de United Airlines, con destino a Washington D.C. Sin embargo, los pasajeros a bordo se enfrentaron a los secuestradores y lograron retomar el control del avión, evitando así lo que pudo haber sido un ataque al Capitolio o la Casa Blanca de Estados Unidos. Pese a los esfuerzos, la aeronave se estrelló en un campo en Shakesville, Pennsylvania, a las 10:03 de la mañana. En este incidente se reportó el fallecimiento de las 44 personas abordó.
Dos décadas más tarde, los ataques de aquel 11 de septiembre siguen en la mente de los estadounidenses. Los atentados en Nueva York y Washington pasaron a marcar un antes y un después a nivel nacional, e incluso global.
Un suceso que cambió la vida de todos
Una encuesta del Centro de Investigaciones Pew realizada en agosto de 2023 revela que 93 % de los estadounidenses mayores de 30 años recuerdan con precisión dónde estaban aquel día.
El medio de comunicación internacional BBC menciona que en otro sondeo del Pew, hecho hace cinco años, 76% de los consultados mencionaron estos ataques como uno de los 10 eventos históricos ocurridos durante su vida, superando con creces otros hechos como la elección de Barack Obama como el primer presidente afroestadounidense (40%) o la revolución tecnológica de las últimas décadas (22%) que trajo consigo las computadoras, internet, los teléfonos móviles y la redes sociales.
¿Qué pasó después?
En respuesta al terrible ataque, la Administración de George W. Bush declaró la guerra contra el terror y señaló a varios países de Oriente Próximo como “patrocinadores del terrorismo”.
Ese mismo año de los ataques, Estados Unidos invadió Afganistán y en 2003 Irak, dos decisiones con secuelas visibles veinte años después, tales como el aumento de las amenazas por parte de grupos islamistas. Sin embargo, la guerra antiterrorista en Afganistán, trajo como consecuencia positiva la captura de Osama Bin Laden.
En cuanto a la política interna nacional, era vital evitar otro ataque terrorista por lo que esto se convirtió en la preocupación principal del Ejecutivo. Pasando a ser la seguridad nacional un asunto prioritario, por lo que nace la ley USA Patriot, que el Gobierno de Bush impulsó con urgencia pocas semanas después de los atentados.
Con el objetivo de reforzar las capacidades de las agencias gubernamentales para luchar contra el terrorismo, Bush oficializó el 26 de octubre de 2001 la medida, lo que sería una “Ley para unir y fortalecer Estados Unidos proveyendo las herramientas apropiadas para interceptar y obstaculizar el terrorismo”.
La ley se aprobó con una amplia mayoría en la Cámara de Representantes y en el Senado. Sin embargo, muchos congresistas denunciaron presiones de la Administración Bush para sacar la ley adelante, acusándolos de ser responsables en caso de otro ataque.
Esta se divide en secciones que tratan distintos frentes de la lucha antiterrorista, como la tipificación de nuevas amenazas, tecnologías, y crímenes, el espionaje de sospechosos o las condenas para terroristas.
Entre sus normativas más criticadas está el acceso permitido de agencias como la CIA o la NSA a la propiedad privada y a datos personales de los investigados, sin notificarlo y sin supervisión de un tribunal. Permisos los cuales, aún veintidós años después causan revuelo e indignación en los ciudadanos estadounidenses.
La ley USA Patriot también permite la detención indefinida sin juicio de extranjeros que puedan ser sospechosos o acusados de poner en riesgo la seguridad nacional. Para esto se creó el centro de detención de Guantánamo, en la isla de Cuba, por la que Estados Unidos ha recibido críticas por parte de los defensores de los derechos humanos.
Este hecho no solo eclipsó la vida de los estadounidense y sus residentes, sino que también marcó un antes y un después en el mundo.